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Aznar comienza su visita a Colombia con una jornada turística en Cartagena

El casco histórico de Cartagena de Indias, una joya del urbanismo colonial español en el Caribe, fue la puerta de entrada elegida por el presidente del Gobierno, José María Aznar, para iniciar su primera visita oficial a Colombia. El nuevo presidente de este país, Andrés Pastrana, se desplazó hasta este puerto para servir de anfitrión y guía de su homólogo español, que, recibido por unos 3.000 niños provistos de banderas blancas, dedicó sus primeras horas en suelo colombiano a visitar la ciudad y sus alrededores y a conocer alguno de los programas que la cooperación española desarrolla en ella. Aunque la visita oficial a Colombia comenzará mañana, lunes, en la capital, Bogotá, el fin de semana turístico en Cartagena va a permitir a Aznar mantener largas conversaciones privadas con Pastrana, de ideología afín a la del PP y con una estrecha amistad con el presidente del Congreso, Federico Trillo.Esta diplomacia de fin de semana, que en España suele practicar en el Coto de Doñana o en Ibiza, culminó ayer con un paseo nocturno en coche de caballos que el matrimonio Aznar y el matrimonio Pastrana realizaron por las calles y plazas del casco antiguo de Cartagena, repleto de casas coloniales de las que cuelgan bellos balcones de madera y en cuya restauración trabajan artesanos formados en la escuela taller que financia, en parte, la cooperación española.

La Escuela Taller, donde los jóvenes aprenden oficios artesanales de la construcción, ha permitido la rehabilitación y conservación de este patrimonio arquitectónico y la recuperación de oficios tradicionales y técnicas antiguas de construcción. España aporta anualmente 40 millones de pesetas al funcionamiento de esta escuela, situada en un noble edificio del casco histórico que hoy será visitado por Aznar.

Antes, Aznar y Pastrana, en el paseo marítimo que bordea las murallas de Cartagena, asistieron a la inauguración del monumento a la Unión de los Océanos, una ceremonia ecológica en la que se arrojó a las azules aguas del Caribe otras recogidas en los cinco océanos y que mezcladas en una ánfora fueron vertidas por Alexandra Cousteau, nieta del comandante francés que dedicó su vida a la defensa de los mares.

El embajador de España, Yago Pico de Coaña, considera que las relaciones políticas y económicas entre España y Colombia, que se han mantenido a nivel alto con el anterior Gobierno de Ernesto Samper, pueden recibir un nuevo impulso tras la llegada al poder del conservador Pastrana, que ha presentado un ambicioso plan de reforma de la sociedad colombiana, desgarrada por un largo conflicto armado con el movimiento guerrillero más veterano de América y carcomida por la influencia del narcotráfico y la corrupción política.

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