El director de Bancaixa acelera su despedida para salvar a su equipo de las maniobras del PP
Salvar a su equipo en un trasfondo de maniobras desde el PP para culminar el control de las cajas de ahorro iniciado con la ley autonómica que regula estas entidades de ahorro. Ese es el objetivo que ha perseguido Emili Tortosa con su dimisión como director general de Bancaixa, que se hizo oficial ayer. El relevo por Fernando García Checa, su adjunto en la dirección, va en ese sentido. Aunque Tortosa atribuyó su marcha a una reflexión personal sobre el agotamiento de una etapa profesional, los socialistas la achacan al acoso de los populares y consideran que se ha roto el pacto de estabilidad al que llegaron con el PP.
Los socialistas evidenciaron ayer su malestar por la dimisión de Tortosa -que atribuyen a las presiones y maniobras de sectores del PP-, al abstenerse sus consejeros en la votación del nuevo director general de Bancaixa, Fernando García Checa, pese a que éste partía con el aval del dimisionario. De hecho, García Checa consiguió el visto bueno del consejo de Bancaixa gracias al voto del representante de UGT. "He pedido el relevo. He puesto día y hora a mi marcha", señaló ayer Emili Tortosa, quien permanecerá vinculado al grupo Bancaixa desde su puesto de consejero del Banco de Valencia, con su presencia en la Fundación Etnor y en el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas. Fuentes de la entidad destacaron el escaso entedimiento de Tortosa con Julio de Miguel, el presidente nombrado hace tres meses al culminar la operación de control que el Consell de Eduardo Zaplana inició con la polémica reforma de la ley valenciana de cajas. Tortosa aceleró la dimisión, que tenía decidida a principios de semana, para evitar que cuajasen movimientos de círculos del PP que pretendían aprovechar su marcha para colocar a una persona ajena al equipo que ha dirigido la caja en los últimos nueve años. La continuidad de García Checa como director general es cuestionada por algunos medios financieros, a medio plazo, sobre todo si el PP revalida su victoria en las elecciones autonómicas del año que viene.PÁGINA 3
