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Roig prepara su dimisión después de que sus consejeros le inviten a "salir con dignidad"

La gran pregunta. ¿Se marcha Roig? Todo apunta a que el presidente del Valencia, Francisco Roig, ha decidido abandonar la entidad siguiendo los consejos de algunos de sus consejeros, que le han invitado a "salir con dignidad y hombría". Pedro Cortés, vicepresidente, y Jaime Ortí, un hombre de consenso, se perfilan como máximos candidatos a suceder a Roig, después de que el otro vicepresidente, Jaime Molina, haya descartado su candidatura. El todavía presidente ya ha escrito su carta de dimisión según uno de sus consejeros y la hará efectiva hoy.

Roig medita abandonar la presidencia como "un gesto de grandeza", según explicó ayer uno de sus consejeros. Con el equipo hundido en la tabla (decimoctavo), con la gente pidiéndole a gritos que se marche, con la Fundación del club esperando que se resuelva a su favor una demanda contra él, Roig cree haber llegado a un callejón sin salida. Sus allegados le aconsejan que se vaya, pero todo depende de él, que controla más acciones que nadie (un 40% del total).La marcha efectiva de Roig, que ha invertido más de 200 millones en acciones, sólo parece probable si el juez, en una sentencia que se espera para antes de final de año, decide anular la última ampliación de capital del club, con lo que se volvería a equilibrar el control accionarial, y una candidatura alternativa tendría opciones de derrocarle.

Entretanto, se ha abierto la batalla por la sucesión. Los dos vicepresidentes -Pedro Cortés y Jaime Molina- aparecían como los candidatos naturales, pero Molina ya ha descartado esta opción. Existe, sin embargo, un tercer hombre: Jaime Ortí, una persona dialogante ,con buenas relaciones con la prensa, la oposición al presidente y el propio Roig, que estuvo cenando con él la noche del domingo. Sería un candidato de consenso que trataría de sosegar el club, aunque en su contra está el escaso número acciones que acumula, con lo que sería muy vulnerable. "Pienso que puedo aportar algo. Dar una imagen de unidad y evitar las guerras ya sería muy importante" comentó ayer Ortí. Pero Ortí será presidente si logra derrotar al otro gran candidato, Pedro Cortés, que desea ocupar el sillón de mando desde el mismo momento en que aceptó pactar con Roig para entrar en el Consejo. Cortés es un veterano del poder en el club: fue presidente en el Valencia que descendió a Segunda en 1986 y estuvo en las directivas de Vicente Tormo, Arturo Tuzón y ahora Paco Roig. Su unión con Roig fue puramente por interés y lo lógico es que el presidente se oponga a su candidatura.

Ni siquiera se plantea que la dimisión de Roig lleve aparejada la del resto del Consejo, tal y como piden los aficionados. "Tanto si Roig se va como si no se va, seguirá mandando", comenta Alberto Martí, uno de los miembros de la fugaz oposición que trató de desbancar a Francisco Roig el pasado verano.

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