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IU pide crear zonas para el nudismo en riberas y montañas

Los diputados de IU en la Asamblea pretenden que los amantes madrileños del naturismo lo tengan más sencillo a la hora de liberarse de sus prendas. Para ello, el parlamentario Luis Miguel Sánchez Seseña va a presentar esta semana una proposición no de ley en la que sugiere "establecer o declarar zonas naturistas convenientemente señalizadas" en lugares públicos propicios, como riberas de ríos, áreas de montaña, piscinas o gimnasios.

El diputado regional Sánchez Seseña, internauta confeso y vocacional, tuvo conocimiento, en una de sus incursiones por la red, de la próxima constitución de una Asociación para el Desarrollo del Naturismo en la Comunidad de Madrid. Sus integrantes le abrieron los ojos en sucesivos correos electrónicos sobre las dificultades que los nudistas madrileños tienen para desarrollar su "forma de vida en armonía con la naturaleza".En realidad, a estas personas sólo les caben dos posibilidades: acudir a uno de los dos desangelados solárium que sobreviven en las piscinas municipales de la capital o buscar algún lugar recóndito en el campo y confiar en que no les incordie ninguna mirada indiscreta.

Esta precariedad contrasta con la situación de las principales ciudades europeas y de la misma Barcelona, que cuenta con una playa nudista urbana de gran éxito y estudia extender la idea por distintas piscinas.

El diputado de izquierdas entiende que las autoridades municipales y regionales se encuentran atenazadas "por prejuicios culturales o religiosos". De esta manera, agrega, "se imposibilita ejercer un derecho que no colisiona con ningún otro, pero que en la práctica no puede ser desarrollado de una manera natural y normalizada".

¿Cómo lograr que cambien las tornas? Promoviendo desde la Administración, se responde Sánchez Seseña, la declaración de zonas "convenientemente señalizadas" en parajes propicios para que los naturistas disfruten del contacto de sus cuerpos desnudos con el entorno natural. Ésta es la única manera de que los entusiastas de la vida en cueros abandonen su "indeseable semiclandestinidad" del momento actual, que sólo acarrea "situaciones insólitas" entre ellos y los ciudadanos que involuntariamente les sorprenden en su desnudez.

Imaginación contra pobreza

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Además de en zonas al aire libre, las facilidades al nudismo deben completarse, según IU, con horarios específicos en balnearios, piscinas y gimnasios. Entre unas cosas y otras, el naturismo puede convertirse en un reclamo turístico, una solución imaginativa "para el desarrollo de zonas deprimidas que aún conservan parajes naturales de interés", apunta el promotor de esta iniciativa.Hacía más de una década que los políticos madrileños no planteaban el tema del nudismo en su que hacer legislativo.

El 1 de agosto de 1986, el Ayuntamiento de Madrid, con el socialista Juan Barranco recién instalado en la alcaldía, inauguró el primer solárium nudista en el centro deportivo de La Elipa.

Se trataba de un promontorio de 500 metros cuadrados, con varias duchas y capacidad para unos 200 usuarios. El entonces gerente del Instituto Municipal de Deportes, Fernando Arroyo, proclamó: "Los requisitos para acceder no son otros que los de adaptarse al entorno; esto es, desprenderse de la ropa".

Un año después, el Instituto Municipal de Deportes repitió la jugada en la piscina del barrio del Pilar. Desde entonces, la oferta para el esparcimiento sin ropajes engorrosos ha permanecido sin variación.

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