Las aseguradoras de coches exigirán a los clientes un historial de accidentes
Las aseguradoras de automóviles solicitarán a los clientes que procedan de otras compañías un certificado de siniestralidad antes de suscribir una póliza. Este certificado, definido en un borrador de protocolo redactado el pasado 1 de octubre, es un historial de los accidentes de los clientes en los últimos cinco años como máximo, que será emitido por la anterior aseguradora. Las empresas quieren que se ponga en práctica el 1 de diciembre.
Cambiar de seguro del automóvil estará más vigilado a partir de diciembre. Las compañías quieren que a principios de ese mes esté implantado el denominado certificado de siniestralidad, un documento que recopila los accidentes que ha tenido el titular de un seguro en los últimos cinco años como máximo.Este certificado, que ahora no se pide, deberá ser presentado por el cliente que quiera cambiar de compañía de seguros y será emitido, en un máximo de 72 horas, por la entidad que abandona. En la actualidad, hay suscritas en España un total de 18,01 millones de pólizas de seguros del automóvil, lo cual supone un volumen de facturación de 1,023 billones de pesetas.
Los extremos de este nuevo mecanismo, dirigido a controlar a los malos conductores, están contenidos en un un documento denominado Protocolo de las entidades aseguradoras de automóviles por la transparencia y calidad en el sector. Este borrador de protocolo, redactado el 1 de octubre, ha sido aprobado por el comité ejecutivo de la patronal, Unespa, así como por su comisión de automóviles.
Es decir, cuenta con el visto bueno y el respaldo de las empresas más significativas del sector: Mapfre, Mutua Madrileña, Allianz Ras, Winterthur, Pelayo, Banco Vitalicio, AGF Unión Fénix, Multinacional Aseguradora , UAP o Axa, según explicaron fuentes de la patronal.
Adhesión formal
Sin embargo, no será definitivo hasta que ese respaldo se convierta en adhesión formal, proceso que se está produciendo estos días. Y sólo será efectivo si esa adhesión es masiva. Este esquema es similar al que se practica en otros países europeos, como Francia. La diferencia radica en que en Francia está recogido en la legislación referida al seguro y no en un protocolo entre empresas.Fuentes de las compañías creen posible que este certificado puede ser incorporado en el reglamento de la Ley del Seguro, que está ultimando el Ministerio de Economía.
El primero de los nueve acuerdos que recoge el protocolo señala que el certificado "será un documento extendido por las entidades con información detallada, precisa y actualizada sobre la evolución reciente de la siniestralidad del asegurado durante el tiempo en que ha permanecido en la entidad, con un máximo de cinco años. De esta forma, el consumidor dispondrá de un eficaz mecanismo para demostrar su calidad como conductor y la entidad de un elemento necesario para la tarificación correcta del riesgo".
En los restantes acuerdos, las empresas se comprometen a "utilizar una publicidad clara y veraz", a impulsar programas que mejoren la tarificación de riesgos", a "agilizar el pago de indemnizaciones a las víctimas de accidentes de tráfico, liquidándolos en tres meses" y a "aplicar sistemas de previsión contra el fraude".
El documento distribuido entre las compañías aseguradoras lleva un anexo en el que se detalla la normativa del certificado de siniestralidad. En él se explica: "Las entidades aseguradoras a quienes se les demande la formalización de un contrato de seguros de automóviles solicitarán del futuro tomador [cliente] el certificado de siniestralidad, emitido por la aseguradora que cubriera el riesgo con anterioridad".
Además, en este documento se especifica el modelo oficial del certificado y se fija la constitución de una comisión de seguimiento que dependerá directamente de la patronal, Unespa.
