La Diputación de Zamora adjudicaba las obras en 1987 sin rebaja del precio inicial
La adjudicación de obras por contratación directa en la Diputación de Zamora durante el año 1987 fue "un escándalo absoluto" aseguró ayer el único diputado de Izquierda Unida en esta institución, Francisco Molina, tras el análisis efectuado por la oposición de los últimos datos entregados a la comisión especial de investigación. Tan sólo dos de las 200 obras contratadas directamente por la diputación en 1987 se adjudicaron con una rebaja del tipo inicial de licitación.
El presidente de la. Diputación, Antolín Martín -pendiente de expulsión del PP y de una moción de censura-, fue, junto al constructor Eduardo Corrales, quien destapó el supuesto es cándalo. La línea de investigación de la oposición -que se reunirá nuevamente el jueves para recibir más documentación quiere establecer las diferecias en las adjudicaciones y sus sistemas, según quien ocupara la responsabilidad del departa mento de Obras. El análisis de la comisión especial establece claras diferencias entre las ad judicaciones directas de los años 1987, 1988 y 1989.En 1987, de un total de 200 obras adjudicadas por el sistema de contratación directa, sólo dos proyectos (el1%) fue ron encargadas por debajo de su precio de licitación inicial. Las 198 restantes se contrata ron en el mismo precio de salida, pese a que el sistema obliga a la presentación de al menos tres ofertas de otras tantas empresas.En 1988, el mismo sistema experimenta un cambio radical. Aunque persiste alguna adjudicación al tipo, éstas son mínimas, mientras se observa que las rebajas sobre el precio de salida alcanzan porcentajes de hasta un 30%. De ese año se recuerda el paso por el área de Obras del diputado Eustaquio Villar, un histórico del PP zamorano que cortó de raíz las prácticas anteriores en el departamento y que cesó "por razones de salud" ese año
'Destajos' polémicos
En 1989, las ofertas de los constructores se moderaron y las rebajas resultaron sustancialmente menores, excepto en los proyectos de alumbrado. De ese año, destaca que una sola empresa, Hermanos Tábara, SA (Hertasa), recibió el 20% del volumen de obra adjudicado, casi 3.000 millones de pesetas, con una rebaja de tan sólo el 4% sobre el tipo de licitación.
Aún faltan, no obstante, muchos datos por conocer. El PSOE ha pedido la relación de obras y proyectos encargados y pagados desde áreas diferentes a la de Obras. Por ejemplo, las adjudicaciones del departamento de Deportes, con la construcción- de frontones que se caían apenas eran pagados.
IU ha solicitado igualmente la relación de los denominados popularmente destajos, unos fondos propios de la institución provincial que constituyen el capítulo más incontrolado en la corporación y que han movido cientos de millones en algunos ejercicios.
Los destajos son pequeñas obras, como el bacheo de carreteras, por ejemplo, que se encargaban directamente por el equipo de Gobierno y sobre las que prácticamente no existía el más mínimo control desde la oposición.
