Un incidiente absurdo aparta a Sainz del Safari

El Safari de Carlos Sainz fue breve. Su participación en la tercera carrera de la temporada duró menos que una excursión dominguera. Acabó en una cuneta a los 120 kilómetros del comienzo del rally cuando un animal se cruzó en su camino y, al intentar esquivarlo, el Ford de Sainz dañó una rueda que el propio piloto, junto a su copiloto Luis Moya, tuvo que cambiar. La reparación de emergencia no fue perfecta y, al poco tiempo la rueda volvió a saltar, averiando irremediablemente los espárragos de sujeción.En el momento del incidente, Sainz ocupaba la tercera posición de la clasificación. "Claro que estoy decepcionado", manifestó el piloto madrileño a los pocos. minutos del confirmarse su adiós al Safari 97.

"Después de tantos. días de trabajo preparando intensamente este rally, sabe fatal tener que abandonar tan pronto por culpa de un incidente tan absurdo". Sainz y Moya fueron recogidos inmediatamente por un helicóptero y anoche mismo tomaron el avión para regresar a España.

Si el año pasado Sainz no acabó la única carrera africana del calendario por culpa de la fragilidad de su Ford, esta vez el infortunio del doble campeón mundial se vistió de impala. Uno de esos animales, característicos de la sabana de Kenia, fue el causante- del primer abandono de Sainz esta temporada. Hasta cruzarse con él, el piloto español había superado sin demasiados problemas el primer sector competitivo del rally, con 72 kilómetros, a pesar de que su Ford sufrió un pinchazo, como muchos otros participantes.

La retirada en el Safari puede suponer que Sainz pierda- el liderato en el Mundial, aunque, sus inmediatos perseguidores en el campeonato no sumarán puntos en el Safari: el italiano Piero Liatti no corre esta prueba y el sueco Kenneth Eriksson también abandonó ayer, víctima de la dureza del terreno.

"Nuevamente se ha visto que las normas de la Federación Internacional están equivocadas", explicó Sainz. "Si hubiera estado permitida la asistencia en todo el recorrido,

como antes, habríamos podido continuar sin perder demasiado tiempo". La avería que apartó a Sainz no fue excesivamente grave, pero el- piloto y su copiloto, con las herramientas de emergencia que transportan en el interior del coche, no pudieron repararla.

La eliminación de Sainz dejó la representación del equipo Ford en manos del segundo piloto de la escudería, Armin Schwarz, y el alemán se colocó líder destacado de la carrera al término de la etapa inicial. Edificó su ventaja sobre la base de una elección arriesgada de neumáticos: fue el único de los favoritos que optó por utilizar la espuma impinchable de Michelin.

La estrategia arriesgada de Schwarz le permitió acabar el primer día con más de dos mi nutos de ventaja sobre los británicos Richard Burns (Mitsu bishi) y Colin McRae (Subaru) y sobre el actual campeón del mundo, el finlandés Tommi Makinen (Mitsubishi). Estos cuatro hombres, junto al local Ian Duncan (Toyota), se disputarán la victoria en las dos últimas etapas. "Para el equipo Ford sería importante que Armin Schwarz ganara el Safari", dijo Sainz.