El Gobierno de Pekín firmará dos convenios internacionales sobre derechos humanos
China dijo ayer que está considerando firmar dos convenios internacionales sobre derechos humanos, según informó el portavoz del Ministerio de Exteriores, Tang Guoqiang. "Lo estamos pensando seriamente" dijo Tang, que señaló que únicamente corresponde al Gobierno de Pekín el tomar la decisión de cuándo suscribirá esos acuerdos internacionales. El portavoz instó a Estados Unidos a acabar con lo que calificó de "política errónea" de Washington, la política de utilizar los derechos humanos para interferir en los asuntos internos de China.
La Casa Blanca aplaudió la posibilidad de que Pekín firme las dos convenciones, pero destacó que la cuestión de los derechos humanos continuará siendo básica en el desarrollo de las relaciones entre los dos países. Funcionarios norteamericanos indicaron que no creen que la firma sea inminente. También se ignora de qué convenciones se trata y qué aspectos cubren.La secretaria de Estado de EE UU, Madeleine Albright, visitó China a principios de semana para su primera conversación con los dirigentes de Pekín e indicó que no había habido progresos concretos en materia de derechos humanos. Sin embargo, el diario The New York Times, citó a fuentes norteamericanas y chinas para informar sobre un acuerdo "muy avanzado" entre Pekín y Washington que permitiría el exilio estadounidense a Wang Dan, uno de los líderes del movimiento estudiantil chino de 1989, condenado el pasado otoño a 14 años de prisión.
El Gobierno de Pekín, por otra parte, ha ordenado que se refuercen los controles en la venta y distribución de explosivos a los dos días de que tres bombas de relojería causasen al menos cuatro muertos en la región autónoma de Xinjiang, poblada mayoritariamente por musulmanes.
Una circular del Ministerio de Seguridad Pública, que publica el Diario del Pueblo, indica que por el país circulan gran,des cantidades de explosivos ilegales cuyo control es frecuentemente caótico. La normativa no se refiere a las explosiones ocurridas el martes en la noroccidental Xinjiang, que han sido ingnoradas. por los medíos oficiales de comunicación. "Dinamita producida ilegalmente o que ha sido robada de unidades castrenses ha permitido a veces a criminales y delincuentes tener y hacer uso de explosivos y con ello poner en grave peligro la seguridad pública", señala el texto.
Residentes en la capital de Xinjiang, Urumqi, en donde estallaron tres bombas colocadas en autobuses públicos a intervalos de pocos minutos -lo que hace prever que se trate de un ataque coordinado-, dijeron ayer que las autoridades locales emitieron un comunicado en el que se confirma la muerte de cuatro personas.
El comunicado, que no se hizo público sino que era para circulación interna de ministerios, comisarías e instituciones oficiales, ordena que se estrechen las medidas de seguridad, en las que se incluye el registro de las personas y de su equipaje o bolsos de mano.
"En la calle no se ven ahora soldados armados solo más policía y equipos de guardias de seguridad que están patrullando", declaró anoche un residente de Urumqi. La gente está aún nerviosa", añadió la fuente. "La primera cosa que la gente dice cuando llama a sus amigos es preguntarles si se encuentran bien y si están en buenas condiciones de salud".
Las explosiones que, según medios oficiales, hirieron al menos a 60 personas ocurrieron en cuestión de minutos en diferentes partes de la ciudad, que es el centro del control chino sobre la totalidad de la región y de su población uigur.
El triple atentado ocurrió mientras Pekín vivía los actos Finales de las exequias de Deng Xiaoping, quien murió el pasado día 19.Las bombas fueron las primeras acciones de violencia conocidas en Xirijiang -una región que los separatistas musulmanes llaman Turkestán Este- desde que los disturbios antichinos en la ciudad de Yining causasen entre el 5 y el 6 de febrero 9 muertos. Nadie se ha responsabilizado de las explosiones.
