_
_
_
_
_
Crítica:"HIP-HOP"
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Organización anárquica

A veces, algo tan viejo como el hip-hop se puede convertir en una de las vanguardias intelectuales de la música; su territorio mental es localista, pero sus consignas reflejan el conocimiento de una realidad que abarca el mundo, lo reconoce inamovible y, a través de su lenguaje, que es básicamente la palabra, lo dibuja con hiperrealismo. Los belgas De Puta Madre, con un hijo de emigrantes españoles al frente, presentaban por vez primera en España Une ball dans la tête. Resulta llamativo comprobar cómo ha hecho mella en los últimos años el hip-hop y cómo se llenó hasta la bandera el local. Sobre el escenario madrileño, De Puta Madre hilaron un tema tras otro en anárquica organización, con el respaldo imprescindible de un gran maestro de los platos, el pinchadiscos Grazzhoppa, que resolvió más del 50% del concierto con su habilidad. De Puta Madre son tan enérgicos como puros en su propuesta: el único artificio es la dureza de su puesta en escena y la mejor apuesta su falta de prejuicios y su desinhibida lengua que, por otra parte, también supuso lo más cansino por el insistente empeño en repetir la expresión "de puta madre" más de cuarenta veces en una hora. Esta reiteración, mezclada con la distancia que provoca el percibir que te están contando algo vital en un idioma que no entiendes, ayudó quizá a dejar en nebulosa un concierto brillante.

De Puta Madre

Sala Plugg. Entradas: 1.000 pesetas. Madrid, 8 de febrero.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_