Estudiantes regala la victoria al Limoges

, Ni siquiera Europa permanece fiel a Estudiantes, que atraviesa una crisis dé gran magnitud que esta impensable derrota ante el Limoges va a agravar. En picado en la Liga ACB -sólo ha ganado tres de los últimos 11 partidos- y fracasado en la Copa -cayó en primera ronda contra el Cáceres- buscaba aire el bloque madrileño en la competición continental, donde estaba firmando una trayectoria sensacional y altamente meritoria. La sorprendente caída ante los franceses arroja demasiadas dudas y, por la forma en que se produjo puede minar anímicamente a los jugadores de Hernández.

Tenía el partido en el bolsillo Estudiantes, no sólo por méritos propios sino también por desinterés ajeno. Plagado de buenos jugadores, viejos conocidos la mayoría de ellos -como los internacionales galos Forte, Bonato, Occansey y M'Baia o el angoleño Conçeiçao, ya para siempre ligado a la crónica negra del baloncesto español-, el Limoges atesora calidad de sobra para incomodar a cualquier rival europeo. Sucedió, simplemente, que sus jugadores decidieron dejar para otro día la demostración de sus cualidades.

Pero hubo un antes y un después de Azofra. Viajaba Estudiantes con una renta de 16 puntos, 56-40, a falta de 10 minutos. Todo parecía hecho, todo estaba hecho. Hasta que Azofra perdió, literalmente los papeles. Tres minutos de caos del base estudiantil arrastraron a todo el equipo madrileño.