Garzón busca el cadáver de un mendigo utilizado como cobaya
El juez Baltasar Garzón investiga el paradero del cadáver de un mendigo, presuntamente fallecido en julio de 1988, para intentar demostrar que el Cesid lo utilizó como cobaya humana con el objetivo de experimentar la droga que se iba a emplear en el secuestro del dirigente de ETA Josu Ternera. El magistrado busca también a dos hermanos drogadictos que, según algunos testimonios, iban a ser utilizados como cobayas. Garzón prevé llamar a declarar a un cardiólogo amigo del general Emilio Alonso Manglano presuntamente implicado en el caso. Página 20
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