Jackson: "La diversidad es la fuerza de este partido"
La triunfal intervención de Hillary puso el broche a una jornada de la convención en la que la unidad del Partido Demócrata quedó resuelta de cara a la campana electoral, pese a las voces de disenso de prestigiosos líderes que critican el pragmatismo de Clinton y el olvido de los principios del partido. Pero, como dijo el reverendo Jesse Jackson, esas divergencias fortalecen la unidad de los demócratas.Mario Cuomo, ex gobernador de Nueva York, que hace cuatro años introdujo al candidato Bill Clinton con un excelente discurso en la Convención de Nueva York, tuvo que resignarse esta vez con unos minutos en horario no estelar.
Cuomo, una de las figuras del ala liberal, no se calló la denuncia sobre los riesgos de desmantelar las leyes de la beneficencia, pero dijo que tanto Clinton como el vicepresidente, Al Gore, le habían asegurado que trabajarían en los próximos cuatro años para corregir las injusticias que haya, especialmente para los niños de las capas más desamparadas. Y para que no hubiera dudas, Mario Cuomo hizo un llamamiento a la unidad: "Olvidaos de los nuevos demócratas, los viejos demócratas, los demócratas conservadores o liberales, o los neoliberales".
La quebrada voz de Jackson resonó también en el auditorio en tonos parecidos. Lejos de aquella actitud desafiante ante Clinton que mantuvo hace cuatro años, y ya con el testigo en la mano para entregárselo a su hijo, representante por Illinois, el líder de los derechos civiles pidió que no se olvide el drama de los pobres, de los paisajes urbanos de desolación, de las cárceles repletas, "de las familias rotas, las ciudades rotas, los sueños rotos".
Desacuerdo con Clinton
Sin ocultar su desacuerdo con Clinton sobre el fin de las leyes de protección social, Jackson dedicó sus palabras más ácidas a los republicanos y recordó que en San Diego, Pat Buchanan no había podido hablar para no alterar el mensaje de moderación que a Dole le interesa, pero que los demócratas "pueden estar en desacuerdo y trabajar juntos, porque la diversidad es la fuerza de este partido". "No se puede juzgar a un libro por su cubierta, y en la cubierta de la Convención de San Diego, los republicanos pusieron a Colin Powell y a Jack Kemp, pero en su interior, el libro estaba escrito por Newt Gingrich, Ralph Reed [líder de la Coalición Cristiana] y Pat Buchanan".El delegado de base comparte esta opinión, aunque sólo sea para digerir mejor la amarga píldora de la moderación que sindicatos, minorías y grupos tradicionales de apoyo a los demócratas tienen que tragar si quieren que Clinton siga en la Casa Blanca.
