Kemp asegura que será leal compañero de su antiguo rival
Para los delegados que pudieran tener dudas, a la luz de pasadas declaraciones o comportamientos, Jack Kemp aseguró el jueves por la noche a la Convención San Diego que será siempre leal compañero de su antiguo rival, Robert Dole, en la lucha por la Casa Blanca y que pedirá apoyo "de todos y cada uno los norteamericanos".En previsión de que sus rectificaciones de última hora sobre las políticas de inmigración y las minorías le cuesten el respaldo de grupos que hasta ahora veían como su defensor en las las del conservadurismo, Kemp matizó: "Quizá no tengamos cada uno de los votos, pero sí hablaremos a todos los corazones.
Balones de fútbol americano de todos los tamaños y colores cruzaron por los aires entre aplausos que ponían fin a las palabras del antiguo quarterback (defensa), que saludaba con gesto característico del lanzamiento del balón. Kemp articuló un discurso de aceptación de candidatura de vicepresidente con mucho más brío y mejor estilo que Dole, a pesar de que se contuvo para no dejar en evidencia a su jefe.
En los 25 minutos que duraron sus palabras, Kemp describió a Dole como un hombre "cuyas palabras transmiten una fuerza tranquila, que sabe lo que significa sacrificarse por los demás y por su país, que ha demostrado valor en el combate". Después de decir que Ronald Reagan había restaurado el espíritu americano y había proporcionado un decenio de prosperidad y expansión, Kemp concluyó comparando a los dos líderes y diciendo que Reagan era el últmo león del siglo XX y Dole, el primer león del siglo XXI.
Revolución económica
Además de la retórica, Kemp prometió una revolución económica si los republicanos ganan las elecciones del 5 de noviembre, una revolución "que pondrá fin a los elevados impuestos, a la regulación excesiva, al gran Estado y a la burocracia". "Acabaremos con el IRS [Hacienda] y sus intrusiones", aseguró, lo que hizo las delicias de los acaudalados espectadores que ocupaban el Centro de Convenciones San Diego. Rescató también algunos de sus temas favoritos después de sus cuatro años como secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano con el preside Bush, y prometió una mayor atención para los desamparados "para ayudar a las jóvenes madres solteras que quieren salir la beneficencia", para que "el padre que trabaja pueda tener empleo que le permita estar casa cuando sus hijos llegan colegio". Según Kemp, todo ello se podrá hacer con los recortes fiscales del 15%, los 500 dólares (62.500 pesetas) de reducción por cada hijo en la declaración de la renta y la disminución del 50% de la fiscalidad sobre los rendimientos del capital."Hoy, el Partido Demócrata no es democrático. Son unos elitistas. No confían en la gente, solamente en el Estado. Por eso han aumentado los impuestos sobre las clases medias y han tratado de nacionalizar nuestro tema sanitario", dijo Kemp.
