Netanyahu promete "paz con seguridad" con todos los vecinos de Israel
Benjamín Netanyahu, elegido para ser el próximo primer ministro de Israel con un programa de firmeza ante los árabes y respecto al proceso de paz en Oriente Próximo, manifestó ayer ante una enfervorida concentración de seguidores del Likud que su objetivo es lograr una "paz con seguridad" con todos los vecinos de Israel. En su discurso de "la victoria" lograda en un proceso que ha partido al país en dos, Netanyahu dijo: "Nuestra primera misión será conseguir y consolidar la paz entre nosotros" pues "la paz empieza en casa".
"Digo, que la paz empieza en la propia casa, pero tiene que seguir fuera", señaló el líder del conservador Likud en su primer discurso tras la derrota del laborista Simón Peres. "Pretendemos desarrollar el proceso de diálogo con todos nuestros vecinos para alcanzar una paz estable, una paz auténtica, una paz con seguridad", palabras que eran un eco de las consignas de la campaña electoral que le ha llevado al poder por menos de 30.000 votos.Esa paz no implicará, en ningún caso, la más mínima cesión de Jerusalén, que quedará para siempre en manos de Israel, sentenció el primer ministro electo. "Lo declaro aquí esta noche: Jerusalén jamás volverá a ser dividida".
La media hora de intervención de Netanyahu, que apareció en el estrado acompañado de su esposa, Sarah, y de la plana mayor del partido, ofreció la primera impresión de lo que van a ser sus posiciones desde la jefatura del Gobierno. "El Gobierno que, con la ayuda de Dios, vamos a formar dentro de unos días reforzará las pacíficas relaciones que ya tenemos con el reino jordano y con Egipto y continuará las negociaciones con los palestinos", aseguró Netanyahu.
El secretario de Estado norteamericano, Warrren Christopher, reconoció ayer que quizás Washington tenga que adaptar su política a la nueva situación que supone Netanyahu, aunque habrá que esperar a ver cómo evoluciona.
