La dirección del Banco argentino de la Nación dimite acusada de soborno
La dirección del Banco de la Nación, incluido su presidente, Aldo Dadone, uno de los hombres de mayor confianza del ministro de Economía argentino, Domingo Cavallo, cayó la noche del martes arrastrada por un escándalo sobre corrupción que implica también a la multinacional IBM, sociedad ganadora de un contrato de 250 millones de dólares para informatizar la importante entidad bancaria.
La renuncia forzada de Dadone y tres directores del banco es consecuencia de las investigaciones judiciales en torno a la existencia de cuantiosos sobornos durante el desarrollo del contrato. Las dimisiones se concretaron tras una entrevista del presidente Carlos Menem con el ministro Cavallo.El Banco de la Nación comprometió con IBM la informatización de su casa central y 520 sucursales. La multinacional subcontrató los servicios de la firma CCR para instalar un sistema alternativo, por 37 millones de dólares cuyo paradero trata de determinar la justicia. Una vez publicado que CCR estaba siendo investigada por evasión fiscal, con la emisión de facturas falsas, se vio obligado a renunciar Juan Carlos Cattáneo, segundo en la Secretaría General de la Presidencia, cuyo titular es Alberto Kohan, muy cercano a Menem.
Cattáneo a quien se cita como uno de los implicados en el suculento negocio, fue titular de Consad, vinculada a CCR, dirigida ahora por su hermano y parte también de la operación. Al menos cinco de los 37 millones supuestamente escamoteados han sido detectados en una cuenta bancaria abierta en Suiza, cuyo bloqueo ha sido pedido por el gobierno argentino, que trata de conocer la identidad de sus titulares.
El ministerio de Economía, que ha nombrado como sucesor de Áldo Dadone al actual secretario de Bancos y Finanzas, Roque Maccarone, indica en una nota que la renuncia de los cuatro funcionarios viene obligada por "el tiempo y la atención que les está demandando la defensa de la actuación del Banco". Fuentes de éste ministerio aludieron a la existencia de una "operación política" contra la dirección del banco, en represalia por las recientes denuncias de Cavallo sobre la actuación de mafias en los poderes del Estado. La principal, según Cavallo, está encabezada por el empresario Alfredo Yabrán quien cuenta con influyentes aliados políticos y pugna por la privatización del Correo, en contra de la postura defendida por el ministro.
