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CONMOCIÓN EN EL FÚTBOL ESPAÑOL

Los presidentes, partidarios del perdón

Los pronósticos: si la votación es a mano alzada, Liga de 22; si hay urna, resultado imprevisible

Mábel Galaz

La guerra del fútbol está vista para sentencia. El jurado -38 clubes de Primera y Segunda División- se reúne hoy (10.30) en asamblea extraordinaria de la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Ellos decidirán el destino de Celta de Vigo y Sevilla para la temporada que se inicia el día 3 de septiembre. La fórmula que se seguirá marcará su resultado. Si los presidentes se pronuncian a mano alzada el sí está garantizado -hace falta mayoría simple-; la urna puede variar la tendencia a adoptar la solución "menos mala". Todo indica que los presidentes se inclinan por el perdón.Los ejecutivos de la LFP han trabajado en las horas previas a la asamblea en dos direcciones: obtener contraprestaciones económicas del Gobierno y evitar una votación secreta. El Consejo Superior de Deportes (CSD) está de acuerdo en colaborar al esfuerzo colectivo. Los asuntos deportivos pendientes de negociación en el mundo del fútbol se reactivarán y, además, se dará más dinero a los clubes.

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Jesús Samper se hizo eco ayer de las declaraciones, realizadas por Rafael Cortés Elvira, secretario de Estado para el Deporte, a EL PAÍS el pasado día 14: "Está claro que los clubes necesitan una contraprestación al esfuerzo que van a tener que hacer con una Liga de 22 equipos y una temporada que será muy difícil para todos".

La LFP ha negociado hasta ayer mismo estas compensaciones que pasan por un aumento del porcentaje de las quinielas de fútbol y la reducción del IVA de los abonos. Los equipos quieren más dinero de las apuestas, si éstas recaudan más porque se aumentan las jornadas. En el aspecto deportivo existe el compromiso de estudiar el decreto 1.006 y la regulación del derecho al trabajo de los futbolistas extranjeros. El paquete de ofertas parece del agrado de los ejecutivos de la LFP. Antonio Baró, su presidente, pedirá el sí de la asamblea a la ampliación del campeonato para salvar a Celta y Sevilla, y anunciará las recompensas pactadas.

Solidaridad

El CSD ha pedido a la LFP a cambio de sus ayudas que haga un llamamiento a la solidaridad. Ésta pasa por controlar la votación. La estrategia es clara: cuantos más espectadores estén presentes hoy en la asamblea mejor y la votación a mano alzada es imprescindible. En esas condiciones ser solidario es más fácil.

Las gestiones de la Liga realizadas durante todo el día de ayer al parecer habían logrado convencer a casi todos los clubes de que desistieran de recurrir al pronunciamiento secreto. El Zaragoza, a través de su director general Javier Paricio, ha sido uno de los equipos que de forma más contudente han pedido privacidad. Si un tercio de los asambleístas solicitan que haya una urna, la Liga de 22 peligrará. El anonimato facilitará la insolidaridad.

La mayoría de los clubes consultados por EL PAÍS no quieren un campeonato de 22 equipos, pero han variado su posición en las últimas horas porque no les queda otra alternativa. Decir no sería poner en peligro la temporada ante la amenaza de Sevilla y Celta de judicializar el conflicto.

Con, una sala llena de periodistas -se permitirá la entrada a todos los medios de comunicación-, el voto de los presidentes será inmortalizado por las cámaras. Todos temen las represalias. Y por si fuera poco, la presión exterior será enorme: 5.000 aficionados de los equipos implicados rodearán en esos momentos la sede oficial de la LFP.

Si la asamblea aprueba readmitir a Sevilla y Celta, Baró pedirá abrir expediente a las dos directivas con el fin último de llegar a su inhabilitación. Con el visto bueno a la propuesta de la LFP, la Federación Española de Fútbol, que hasta ahora se ha mantenido en un silencio sepulcral, confeccionará un nuevo calendario de competición ajustando cuatro jornadas más a un año en el que el campeonato nacional tiene que dejar hueco a las competiciones europeas, la Copa del Rey, y la preparación de la selección para la Eurocopa de 1996.

Una de las opciones que se contempla es hacer compatibles las primeras jornadas de la Copa del Rey, en las que no participan los equipos de Primera, con partidos de Liga, También será necesario jugar en Navidad, para lo que habrá que contar con la aceptación de la AFE, ya que este descanso vacacional está pactado en el convenio con el sindicato de jugadores.

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Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

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