_
_
_
_
_

Nunca habrá acuerdo sobre Gibraltar sin negociación directa advierte Bossano

Bossano, apeló ayer a la madurez de la democracia española para que se comprenda de una vez r todas que el pueblo gibraltareño no aceptará ningún acuerdo sobre su futuro si no se, le tiene en cuenta "de manera directa" en las negociaciones. En un coloquio organizado por el Club Siglo XXI,en madrid el ministro principal de la colonia británica se manifestó "en total desacuerdo" con la forma bilateral en que los Gobiernos del Reino Unido y España vienen tratando el problema. Por eso no se ha podido llegar "a nada" desde 1984 ni podrá llegar aunque el proceso se prolongue durante "otros 200 años más" comentó.

"Es absurdo que se pretenda hablar de descolonizar un país como el mío por un arreglo entre el poder colonial y el vecino de la colonia", enfatizó Bossano a propósito de las conversaciones que mantienen con regularidad en el último decenio el Ministerio español de Asuntos Exteriores y el británico. "Estamos en total desacuerdo" con ellas, resumió, antes de advertir que no ha recibido ningún ultimátum del Foreing Office (Ministerio de Exteriores británico) sobre la aplicación de directivas comunitarias, ni la amenaza de Londres de establecer un mando directo en la Roca, porque sería como "una bomba" y tendría consecuencias.El ministro principal de Gibraltar, que abordó el tema El derecho a la autodeterminación de los gibraltareños y las relaciones con España, insistió en el matiz de que se está hablando de un pueblo "real", con su propia personalidad, "más acentuada incluso desde que el franquismo ordenó el cierre de la verja, algo que hay que agradecerle", y que, por consiguiente, no se le debe ni se le puede ignorar.

Cualquier resolución que afecte a la colonia, pero para la que no se haya tomado en consideración a sus habitantes, es papel mojado, adujo Bossano, del Partido Laborista Socialista, que fue elegido para su cargo en 1988 con el 58% de los votos y . reelegido en 1992 con el 73% -"volveré a serlo en 1996, aunque no por tanto margen", bromó-.

Para ilustrar su afirmación se refirió a la utilización conjunta del aeropuerto situado en el istmo del Peñón, pactada por el Ejecutivo español y el británico en Bruselas en, 1987 y que no se ha llevado a la práctica porque "los llanitos" no lo consienten. No es suficiente con estar sentado a una mesa si a uno sólo se le reconoce como parte de una delegación: "Bossano no puede estar en una negociación en la que se hable de él como de una tercera persona ausente".

El líder gibraltareño, que considera el Tratado de Utrecht de 1713 como un documento obsoleto, aludió en diferentes ocasiones a la Carta de las Naciones Unidas, según la cual cada pueblo tiene derecho a escoger "con cautela" su destino. Es "incomprensible", dijo, que España, "que ha cambiado tanto en tantísimos aspectos con la llegada de la democracia", no haya evolucionado en lo relativo a este caso desde la época del ministro Castiella, "hace 31 años".

En este sentido, Bossano se lamentó de que, precisamente, el "empecinamiento" español en ignorar a Gibraltar como interlocutor, "para no darle ventajas políticas", suponga dificultades para desarrollar con fluidez las colaboraciones. Se centraba en concreto en la lucha para erradicar el narcotráfico y el blanqueo de dinero negro procedente de él, así como el contrabando de tabaco, empeño para cuyo buen fin sí existe desde enero un acuerdo a tres bandas y en el que su Gobierno está "comprometido a fondo".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_