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Religiosos españoles, convencidos de que el misionero Vallmajó fue asesinado

"El padre blanco Joaquín Vallmajó está muerto", aseguran los religiosos españoles de distintas congregaciones que se encuentran actualmente en la ciudad zaireña de Goma, a cuatro kilómetros de la frontera norte con Ruanda. Sacerdotes y monjas carmelitas, hijas de la caridad o de la congregación de San José sostienen que Vallinajó, un mi sionero al que se dio por desaparecido hace semanas, ha sido muerto por los rebeldes del Frente Patriótico Ruandés (FPR).Sabina Irague, una monja navarra que acaba de salir de Ruanda por orden de su superiora, afirma que Vallmajó "era un hombre de mucho carácter, que decía las verdades a cualquiera, y por eso le mataron". Amparo, también hija de la caridad, es de La Carlota, en Córdoba, y añade: "El padre Vallmajó sabía muchos secretos de los tutsis y por eso no lo podían dejar vivo".

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Nadie ha visto el cuerpo de Vallmajó, pero a ninguno de los religiosos españoles que se encuentran en Goma le cabe la mejor duda de su muerte. Según el relato de Sabina, el último acto de valentía, que costó la vida a Vallmajó, fue precisamente con ocasión de la visita de un equipo de una televisión europea al que acompañaba para mostrarle los horrores de esta guerra.

La monja navarra explica que, estando en la localidad de Rukara, al este del país, en zona controlada por el FPR, los tutsis amontonaron los cadáveres de todos los de su etnia que habían sido víctimas de las últimas matanzas cometidas por los hutus para que pareciesen más numerosos. Pero una vez que hubieron terminado la grabación de dichas imágenes, Vallmajó quiso enseñarles a los periodistas los muertos de la etnia hutu que en un lugar cercano habían sido es condidos en una fosa común por el FPR. Según Sabina Irague, eso significó su sentencia de muerte.[Por otra parte, han surgido informaciones contradictorias sobre la caja negra del avión del presidente Habyarimana, que se estrelló en extrañas circunstancias. Dassault Falcon, fabricante del Falcon-50, negó ayer que la caja estuviera en París como afirmaba Le Momde.]

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