Las agencias de viajes confirman la caída de las ventas
"A la industria turística le afecta absolutamente todo y, por desgracia, lo malo de forma muy especial". Estas palabras de Montserrat Castrelo, directora de la agencia de Viajes Ecuador, en Barcelona, corroboradas por todos los profesionales consultados, resumen la situación que viven actualmente dos de los principales destinos turísticos para los españoles: Egipto y Turquía.Los datos confirman la crisis: "Mientras que el año pasado por estas fechas, plena temporada alta, estábamos mandando una media de 30 personas por semana a Egipto", señala Clara Martínez de Salinas, responsable del departamento de África y Oriente de Ticket 31, "estas semanas he enviado a ocho o nueve, y estaba encantada. Ahora creo que volveremos a la situación del verano: cero".
El descenso del turismo ha sido mucho más radical en Egipto, un destino estrella desde hace dos décadas, que en Turquía, totalmente en alza en los últimos tres o cuatro años, y ahora algo retraído. En Egipto, las vacas flacas comenzaron con la guerra del Golfo, momento en el que se produjo el insólito espectáculo de ver vacíos espacios de ordinario abarrotados de turistas. "Ahí empezó el declive", señala María González, adjunta a la dirección de la mayorista Unituvi, "aunque inmediatamente después se produjo una recuperación que, por desgracia, se ha visto interrumpida de nuevo". Unituvi fue, en 1971, la empresa española pionera en ofrecer en su programación viajes organizados a Egipto. Desde entonces han llevado a más de 70.000 turistas a este destino.
En opinión de Fernando Sánchez, jefe de ventas de Juliá Tours, Egipto "hay que considerarlo como un destino perdido a corto plazo". "En 1992 teníamos un chárter de 148 plazas cada domingo. Ahora sólo vendemos en línea regular. Respecto a Turquía, y a pesar de la gravedad de los acontecimientos", prosigue Sánchez, "no hemos constatado una reducción significativa en la demanda".
El caso de Argelia es totalmente diferente: nunca ha sido un destino mayoritario para los españoles, a pesar de los esfuerzos de las autoridades turísticas argelinas, tanto en promoción -vía invitación de periodistas especializados-, como en precios. "Sólo había algún esporádico viaje de negocios", indica Montserrat Castrelo, "y se han parado totalmente".
Hay quien encuentra ciertas ventajas en esta situación. Clara Martínez de Salinas, de Ticket 31, comenta que los turistas que han viajado estos días a Egipto vuelven encantados, porque son los reyes.
