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Odriozola solicita a la IAAF una sanción ejemplar contra el representante de Morceli

La Federación Española de Atletismo no está dispuesta a dejar morir el escándalo despertado por el atleta marroquí Mohamed Taki, que acusó al argelino Nurredin Morceli de haberle sobornado para hacer de liebre en la final de los 1.500 metros de los Mundiales de Stuttgart. José María Odriozola, el máximo responsable del atletismo español, envió ayer un escrito al secretario general de la federación internacional (IAAF), el húngaro Itsvan Gyulai, en el que solicita una sanción contra el manager de Morceli, el argelino Brahma, no sólo por el supuesto intento de soborno, sino también por intentar, según él, poner nervioso a Cacho en los días previos a la final.

Odriozola explicó a EL PAÍS que el comportamiento de Brahma dos días antes de la final fue "muy grave". Según él, el mánager de Morceli quiso desestabilizar la concentración de Cacho al vanagloriarse públicamente ante Miguel Ángel Mostaza, el representante del soriano, de haber conseguido para su pupilo un fijo económico por participar en los Mundiales y una liebre para intentar batir el récord del mundo en la final. Odriozola pidió explicaciones al presidente de la federación internacional, Primo Nebiolo, quien le desmintió rotundamente cualquier trato especial, en lo económico y en lo deportivo, hacia el argelino.En opinión de Odriozola, la actitud de Brahma respondió a un intento de salvar la imagen de Morceli, que no tuvo más remedio que participar en Stuttgart por miedo a una sanción internacional a pesar de haber reiterado hasta días antes de la competición que no concurriría si la IAAF no aceptaba sus pretensiones económicas. "Estaba claro que Morceli no había tenido más remedio que aceptar la condiciones de Nebiolo y su representante intentó salvarle la cara y, de paso, poner nervioso a Cacho. Así se lo comenté a Nebiolo y a otros miembros de la IAAF, quienes desmintieron todas las afirmaciones de Brahma", declaró Odriozola.

Morceli, intocable

Consciente de que los reglamentos internacionales no permiten sancionar a Morceli ni variar el resultado de la prueba de los 1.500 metros, Odriozola suplica en su escrito al secretario general de la IAAF que tome en cuenta el comportamiento del representante del argelino para ver si hubiera lugar a sanción. Brahma había sido uno de los representantes de atletas más beligerantes en el contencioso que mantuvieron con la federación internacional sobre las exigencias de los segundos por participar de los beneficios económicos de los Mundiales. De haber motivos para una sanción, Brahma podría ver retirada su licencia, expedida por la federación argelina, lo que le impediría ejercer su trabajo en el circuito internacional.En el escrito, Odriozola también solicita que sean comprobadas las declaraciones efectuadas por el marroquí Taki, ya que su comportamiento podría suponer una falta a la ética deportiva. El artículo 143 del reglamento de la IAAF establece que "ningún competidor deberá recibir asistencia durante el desarrollo de la prueba". Según Odriozola, las revelaciones de Taki podrían significar que no ha cobrado los 20.000 dólares supuestamente acordados por ayudar a Morceli. Ante la imposibilidad de inculpar a Morceli -Taki no manifestó haber dialogado con él y el argelino siempre podría decir que lo sucedido había sido una maquinación de su manager sin su conocimiento-, Odriozola cree que el marroquí también podría ser sancionado si admite que actuó de liebre conscientemente. "Su tirón en los últimos 300 metros fue muy sospechoso y sus declaraciones posteriores dan a entender que está molesto por no haber cobrado. No es de recibo un comportamiento así", añadió. El presidente de la federación española espera obtener una respuesta de la IAAF el próximo 10 de septiembre, con motivo de la disputa en el Crystal Palace de Londres dé la final del Grand Prix.

Informes

La posición de Taki en todo el asunto es muy complicada. Ni siquiera en su país ha obtenido crédito a sus palabras, ya que en ellas inculpó a uno de los héroes nacionales, Said Auita, quien, según él, medió en el intento de soborno. "Primero vino Brahma y me ofreció 5.000 dólares, lo que rechacé. Poco después, mientras hacía mi calentamiento, me di cuenta de que Auita estaba hablando con Brahma. Se dirigieron a mí. Auita me dijo que Morceli me daría 1.000 dólares si yo le ayudaba. Auita me hizo una parte para decirme que iba a arreglarlo para que Morceli me diera 20.000 dólares".El ministro marroquí de Deportes, Abdalah Belakziz, ha recibido dos informes sobre el caso Taki. Uno de los informes procede del presidente de la federación de atletismo y el otro, del director técnico. Los informes, cuyo contenido no ha sido desvelado, son el resultado de la investigación emprendida por dicho ministerio tras las declaraciones de Taki.

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