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'Jueves negro' para la economía española

El Comité Monetario de los Doce anunció ayer la devaluación de la peseta en. un 8% y del escudo portugués en un 6,5%. El ministro de Economía, Carlos Solchaga, atribuyó más a la incertidumbre política que a la realidad económica la decisión de depreciar la divisa española, que pilló por sorpresa al mundo financiero al acordarse en un día laborable, con todos los mercados operando. La Bolsa de Madrid subió más de un 4%. La devaluación sólo fue la culminación de un auténtico jueves negro: la Encuesta de Población Activa reveló que el paró aumentó en más 250.000 personas en el primer trimestre y que el número de parados alcanza ya los 3,3 millones de personas. Por la mañana se había sabido que la inflación de abril se elevó al 0,4%, muy por encima de lo esperado, y deja la tasa interanual en el 4,6%.

La peseta pierde un 8% en su tercera devaluación

EL PAÍS, La peseta no pudo resistir más las presiones del mercado y sucumbió de nuevo ayer ante los especuladores. El Banco de España aprovechó la reunión ordinaria del Comité Monetario celebrada en Bruselas para pedir un reajuste de las paridades dentro del mecanismo de cambios.

La peseta finalmente quedó devaluada, un 8%, con lo que su nuevo tipo de cambio central con respecto al marco pasa a ser de 79,11, el límite máximo de fluctuación se: sitúa en 74,50 pesetas por marco y el mínimo en 84. La devaluación de ayer supone que la peseta ha perdido un 21,7% desde la primera devaluación el pasado septiembre, cuando perdió un 5%. Posteriormente, en noviembre, se devaluó otro 6%. Portugal se vio arrastrado ayer por la peseta y devaluó el escudo un 6,5%.

Sorprender los mercados

El cúmulo de malas noticias de este jueves negro de la economía española -devaluación, paro e inflación- llevó al ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, a convocar una conferencia de prensa a las siete de la tarde para dar respuesta personalmente ante el creciente deterioro del panorama económico. Solchaga, que inició su comparecencia con un semblante grave y el tono bajo, afirmó que el Gobierno había decidido hacer frente a una peseta "sometida a una fuerte inestabilidad, provocada más por la incertidumbre política que por la, situación real de la economía española", aunque reconoció que este último aspecto también había influido. Añadió que en el clima de incertidumbre política también habían contribuido la profusión de declaraciones de políticos, organizaciones empresariales y sindicales, que vio consideraban fundamental el mantenimiento del tipo de cambio.

Carlos Solchaga afirmó que la decisión de aprovechar una reunión ordinaria del Comité Monetario, para pedir la devaluación pretendía "sorprender al mercado" y evitar mayores movimientos, especulativos para hoy viernes. Sin. embargo, algunos analistas indicaron que la situación debía ser muy grave cuando no se pudo esperar al fin se semana con los mercados que es cuando se hacen habitualmente estas operaciones. El ministro admitió que se habían consumido muchas reservas en los últimos días pero que todavía quedaba un "nivel importante, fuera de inquietud".

El ministro señaló que en todo el proceso y durante la reunión del comité monetario había contado con el "apoyo y comprensión" de los representantes alemanes que en todo momento habían respaldado la política del Gobierno español". Afirmó que durante la reunión del Comité Monetario nadie había planteado en ningún momento que se hubiera considerado la conveniencia de que España tuviera que abandonar el SME.

A pesar de deterioro de panorama en tantos frentes, el titular de Economía insinuó ciertas expectivas de recuperación como consecuencia de la rebaja de tipos de interés y de las ventajas competitivas de la devaluación en exportaciones y turismo. Pero se reafirmó en sus conocidas posiciones de mantener la disciplina y advirtió que "no se pueden perder de vista la necesidad de mantener una vigilancia estrecha con los desequilibrios fiscal, de precios y de la balanza por cuenta corriente".

A preguntas de los periodistas, negó que la peseta estuviera revaluada un 20% hace siete meses, aunque admitió que, "teniendo en cuenta la evolución de los costes laborales, la divisa española podía haber estado sobrevaluada entre un 12% y un 15%".

La petición de devaluación movió de forma espectacular el mercado de valores. La Bolsa de Madrid registró un récord histórico de contratación, más de 64.665 millones de pesetas, y registró al cierre -poco antes de conocerse el porcentaje de devaluación- una subida de 9,96 puntos, que equivale al 4,12%.

En el mercado de deuda se contrataron más de 250.000 millones de pesetas. Nada más conocerse la noticia del realineamiento, los bonos subieron dos puntos, ante la expectativa de próximas rebajas del precio oficial del dinero. La jornada se inició con el anunció del Banco de España antes de abrirse el mercado en el que comunicaba que dejaba de intervenir en apoyo de la peseta que quedaba así en flotación. Pidió al mismo tiempo el realineamiento, pero no se suspendió la cotización de las divisas, en un acto que los analistas calificaron de "sorprendente". La peseta cayó hasta 76,12 pesetas por Marco, frente al cierre de 73,4 del día anterior, pero no llegó a las 77,2 que tenía como límite en el Sistema Monetario.

La City y Aznar

France Press y los analistas de la City de Londres coincidían en afirmar que la nueva crisis de la peseta no había sorprendido a nadie y señalaban, como último detonante de la crisis, las declaraciones efectuadas el miércoles por el líder del Partido Popular (PP), José María Aznar, informa Enric González.

"La peseta española cayó después de que el líder de la oposición, José María Aznar, pidiera una reducción rápida en los tipos de interés, que permanecían en un abrumador 13%", escribió el analista monetario del vespertino Evening Standard. Un portavoz de la sociedad de valores Warburg señaló también, en declaraciones a la cadena de televisión Sky News, que las palabras de Aznar "indicaban su predisposición a suavizar la política monetaria en caso de ganar las elecciones, por lo que los cambistas decidieron subir un poco más su apuesta a favor de la devaluación".

En medios cercanos al Bundesbank se recordó, sin embargo, que la petición del Gobierno español de cambiar la paridad de la peseta responde exactamente a la política que el banco central alemán viene propugnando, esto es la de que el realineamiento se pida a tiempo para que no haya excesivas turbulencias.

Las reacciones de los agentes sociales y económicos a la devaluación no se hicieron esperar. Tal vez la más dura fue la de la patronal. La CEOE, en un comunicado, manifestaba que "el hecho de que haya habido que solicitar una nueva devaluación, después de haber empleado la mayor parte de las reservas de divisas y tras haber colocado los tipos de interés a niveles insostenibles para la actividad económica, demuestra el fracaso de un modelo de política económica que ha debilitado la actividad, el empleo y las inversiones sin corregir los desequilibrios".

El Banco Bilbao Vizcaya (BBV), antes de conocer los términos exactos de la devaluación, justificaba la medida "por la dificultad de mantener la situación hasta pasadas las elecciones". El BCH considera que Ia devaluación no es una tragedia" y estima que "amplía el margen para una bajada de tipos de interés y favorece las exportaciones".

La banca se unió anoche al recorte de 1,5 puntos de los tipos del Banco de España

EL PAÍS, El Banco de España aplicará hoy mismo una rebaja de 1,5 puntos en el precio del dinero que presta a las entidades crediticias, según anunció ayer el ministro de Economía, Carlos Solchaga. Con esta rebaja en el tipo de interés del dinero que presta la entidad emisora a los bancos y cajas de ahorro se situará a un tipo del 11,5%. El Banco de España repetirá hoy la subasta decenal de certificados (CEBE) -que ayer se adjudicaron al 13%- con el nuevo tipo oficial.

Ya el mercado interbancario anticipó ayer la expectativa de la rebaja de tipos de los depósitos a un día al marcar un cambio del 13,5% frente a un 17,75% del día anterior.

De esta reducción del precio oficial del dinero se beneficiarán inmediatamente las empresas, ya que la banca privada ya comenzó a anunciar la rebaja del tipo de interés de sus créditos. El Banco Bilbao Vizcaya decidió rebajar el tipo de interés de sus créditos preferenciales (aquellos que se aplican a sus mejores clientes) en 1,5, con lo que sus créditos preferenciales se concederán al 12,25%.

El Banco Central Hispano recortó un punto. Argentaria no quiso quedarse atrás y en un movimiento combinado todas las entidades que componen este grupo público bajaron sus preferenciales en torno a un punto, situándolos en el 12% de Tasa Anual Equivalente (TAE). Es previsible que hoy se sumen otras entidades a esta rebaja de los tipos de interés a los clientes. Esta bajada general viene a echar mucha agua a la campana de créditos hipotecarios de tipo fijo lanzada hace apenas unas semanas por el Banco Santander.

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