Los antiabortistas se quedaron sin el milagro del 'no'
Los grupos antiabortistas esperaron hasta el último momento el milagro del no. Porque eso precisamente, un milagro, había sido sugerido por la mismísima Virgen María a una vidente irlandesa, Christina Gallagher, quien hasta el cierre de las urnas recorrió las iglesias de la capital irlandesa contando el mensaje sobrenatural recibido.
La Virgen se le apareció, explicaba Gallagher, a principios de noviembre del año pasado, y le dijo: "Observa lo que sucederá en el mundo en estas tres fechas". Y le dio tres fechas. La primera resultó ser el 9 de diciembre, que a la ingenua creyente no le sugirió, nada, pero sí a su confesor. Podía tratarse, le dijo el sacerdote, de la cumbre de Maastricht.
Efectivamente, la Virgen volvíó a aparecerse con aspecto triste y se lo confirmó. "Esa reunión es un signo del poder del Anticristo. Pocos se dan cuenta de que pronto se alzará entre nosotros". La segunda fecha era el 3 de enero, día en que no sucedieron acontecimientos especialmente relevantes. Tal vez podía tratarse, sugirió el confesor, de que el Fondo Monetario Internacional abrió las puertas a la incorporación de los países ex comunistas europeos. La tercera fecha aún no ha llegado y, por tanto, se mantiene en secreto.
La campaña por el no estuvo impregnada, por la parte antiabortista, de este tipo de misticismos. Tras la derrota anunciada ayer, los grupos englobados en el frente Pro Vida han empezado a preparar la batalla del próximo referéndum, el que se celebrará hacia octubre, en fecha aún no determinada -salvo nuevos anuncios celestiales, que no cabe descartar en la muy católica Irlanda- para dirimir definitivamente la espinosa cuestión del aborto. "Esta vez, la pregunta era confusa; en otoño, ganaremos ampliamente, como en l983", afirmó ayer por la mañana un portavoz del movimiento antiabortista.
