Karl Carstens, ex presidente de la República Federal de Alemania
Karl Carstens, ex presidente de la República Federal de Alemania de 1979 a 1984, falleció el sábado pasado en su residencia de Meckenheim, cerca de Bonn, a los 77 años, según informaron fuentes próximas a su familia.Carstens llegó a la presidencia federal con la repulsa. de los sectores de izquierda y de los intelectuales, que le reprochaban su pertenencia al partido nazi. El canciller socialdemócrata Helmut Schmidt le calificó como "persona situada en la extrema derecha del espectro político".
Sin embargo, al ser elegido, Carstens afirmó: "La Constitución encomienda al presidente federal la tarea de ser presidente de todos los ciudadanos y desempeñar su cargo de forma no partidista. Yo me esforzaré con todas mis fuerzas para cumplir esta exigencia". Desde entonces, supo pasar inadvertido, no provocó irritaciones ni conflictos y la mayoría reconoció que desempeñaba el cargo con corrección, con el estilo que caracterizó toda su vida: como un funcionario de la vieja escuela prusiana.
Nació en Bremen el 14 de diciembre de 1914, cuando su padre había caído unos meses antes en un frente de la Primera Guerra Mundial. Sobre su ingreso en el partido nazi en 1937, afirmaba que sin ello "no habría recibido una beca que entonces se pagaba a los estudiantes necesitados".
Después de la guerra, que él hizo en el Ejército alemán, el joven jurista inició una brillante carrera entre la Administración, la política y la cátedra universitaria. De 1955 a 1969 fue secretario de Estado en los ministerios de Asuntos Exteriores, Defensa y en la Cancillería federal.
Su carrera propiamente Política empezó con su elección al Parlamento federal (Bundestag) en 1972, donde pronto llegó a jefe del grupo democristiano. De esos años procede su fama de derechista por su oposición destacada la ostpolitik, la política de entendimiento con el Este iniciada por el entonces canciller Willy Brand. En 1976 fue reelegido diputado y pasó a ocupar la presidencia del Bundestag.
En 1984, Carstens, con problemas cardiacos, no quiso renovar su mandato como presidente y abandonó la actividad política, salvo su asistencia la presidencia de la Unión Cristiano-Demócrata (CDU).
Estaba casado desde 1944 con la doctora internista Veronika Prier y no tenía hijos.
