De la Concha declaró durante cuatro horas ante la juez por el 'caso Ibercorp'
Manuel de la Concha, presidente de¡ grupo Ibercorp y principal implicado, junto a su socio Jaime Soto, en el escándalo de este grupo, declaró ayer durante cuatro horas ante la juez titular del Juzgado número 21 de Madrid, María Paz Redondo. La declaración del Soto y Benito Tamayo, consejero delegado de Ibercorp, prevista en principio también para ayer, se postergó hasta los días 26 y 27, respectivamente. Los tres encausados entraron por la puerta central de los juzgados, y no por el garaje, como hicieron los matrimonios Rubio y Boyer.
De la Concha, tras someterse a las preguntas de la juez y de los abogados de la acusación (José Emilio Rodríguez Menéndez y Marcos García Montes), no quiso hacer declaraciones a la prensa. únicamente, ante la pregunta de si era verdad que había reconocido que la línea de crédito de 4.500 millones concedida por el Banco de España carecía de la firma de un fedatario público (según versión de los abogados acusadores) manifestó: "Ya he hecho las declaraciones en el juzgado y no tengo más que decir".Y añadió: "Tengo la conciencia tranquila". Fuentes del Banco de España han subrayado que la línea de crédito está firmada por el corredor de comercio José Miguel García Lombardía. Estas fuentes han manifestado que el crédito además incluye todas las garantías pignoraticias.
Rodríguez Menéndez, que representa a pequeños accionistas de Sistemas Financieros, y García Montes, que lo hace en nombre de José María Ruiz-Mateos (ayer realizó otro de sus montajes disfrazado de Supermán) y Christian Jiménez, realizaron manifestaciones a la puerta del edificio de los juzgados.
García Montes declaró que De la Concha había reconocido que hubo una información que le pasó Mariano Rubio en su día. Sin embargo el abogado de De la Concha, Ramón Hermosilla, manifestó: "Creo que ese no se dijo". Portavoces de Ibercorp aseguraron, a última hora de la tarde, que era una falsedad y que De la Concha no había afirmado tal cosa.
García Montes también dijo: "Pediré la carta que De la Concha le mandó a Rubio explicando la lista de accionista, para que, junto con la que envió a Miguel Boyer, sean remitidas al gabinete de criminalística de la Guardia Civil para que se haga un informe de la fecha y con qué máquinas se escribieron". Rodríguez Menéndez manifestó que pedirá que el gobernador vuelva a declarar.
Por su parte, el juez decano de Madrid, Antonio García Paredes, se responsabilizó de las limitaciones impuestas a los informadores y las restricciones de acceso cuando declararon Mariano Rubio, los ex ministros Miguel Boyer y Juan Antonio García Díez, y las esposas de los dos primeros, Carmen Posadas e Isabel Preysler.
García Paredes calificó de "injusto, infundado y tendencioso" el afirmar que Rubio y Boyer recibieron trato de favor, pero admitió que él no había presenciado los hechos. Reconoció no tener noticias de que los guardaespaldas de Boyer y Preysler, los mismos que después agredieron a los fotógrafos, habían escoltado al matrimonio sin limitación de acceso.
