El Papa propone al fundador del Opus como ejemplo de cristiano moderno
El papa Juan Pablo II definió ayer a Josemaría Escrivá de Balaguer como ejemplo de cristiano moderno durante la homilía en la que resumió los motivos de la beatificación del fundador del Opus DeI "En una sociedad en la que el afán desenfrenado de poseer cosas materiales convierte a éstas en un ídolo y motivo de alejamiento de Dios, el nuevo beato nos recuerda que estas mismas realidades pueden ser camino para el encuentro de los hombres con Cristo", afirmó el Pontífice ante las más de 150.000 personas que asistieron en la plaza de San Pedro a la beatificación más polémica que la Iglesia católica recuerda en los últimos tiempos. El Papa exhortó a los miembros del Opus Dei "a una más generosa participación en la vida eclesial (...), con particular atención a los más pobres y necesitados".La beatificación del fundador del Opus Dei -que, a diferencia de la canonización, no es un acto infalible- se consumó con la fórmula pronunciada por el Papa: "Concedernosque, de ahora en adelante, pueda [y no deba, como se dice en el caso de los santos] ser llamado beato, y que su fiesta pueda ser celebrada cada año según las normas vigentes", es decir, en los lugares de culto y centros del Opus.
Entre los asistentes se encontraban ex ministros de Franco, como Laureano López Rodó; ex jefes de Estado, como Rafael Caldera (de Venezuela); el presidente del Gobierno italiano, Giulio Andreotti, y destacados núembros de la jerarquía católica.
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