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Entrevista:

"Están matando los sentimientos"

Robert Álvarez

Pregunta. ¿Su ánimo?Respuesta. Triste. El asunto me ha afectado a mí y a mi familia. Mis hijas me preguntan qué sucede, por qué tengo que irme. Pero son pequeñas y en principio, no hay mayor problema.

P. ¿Cómo calificaría el trato del Barcelona?

R. Simplemente, no se ha obrado bien conmigo.

P. La directiva alega que se le ofrecía una indemnización de 60 millones y un contrato como gerente por 25.

R. No está bien que se revelen estos temas. No voy a entrar en ello. En cualquier caso, tengo un contrato con un membrete del club en el que hace dos meses se me ofrecía la renovación.

P. Salvador Alemany, el presidente del baloncesto azulgrana, aduce que hace dos años ya le planteó retirarse y ocupar un cargo administrativo.

R. Entonces se habló de un abanico de posibilidades. Pero sólo eso. Si no, no se habría hecho un contrato con una cláusula de renovación. Además, insisto, en que hace dos meses yo interesaba.

P. ¿Llegó a pensar en aceptar la propuesta de convertirse en gerente?

R. Le comenté a Salvador que podía ser interesante, pero que iba a ser muy difícil que aceptara porque debía tener claro que entraba en un sitio donde habría de estar a gusto y, de la forma como se han hecho las cosas, difícilmente podría estarlo. Creo que podía seguir jugando en el Barcelona. En definitiva todo podría haber sido diferente de haberse planteado como debía.

P. ¿Se ha jugado con sus sentimientos?

R. Espero que no. Mis sentimientos son los que son. He actuado de acuerdo a mis conviccíones. Es difícil decir si estaba equivocado o no o si he pecado de ingenudidad. Pero no me arrepiento de nada.

P. ¿No es una tontería pensar en sentir los colores cuando las cifras son tan grandes?

R. Se están matando los sentimientos o, al menos, dando pie a que desaparezcan. Pero son importantes. Un equipo que quiere estar arriba, como el Barcelona, se tiene que tasar en una buena estructura y en jugadores con calidad. "Pero el rendimiento de éstos será mayor si, además de estar bien pagados, se identifican con el club: ofrecerán una energía que no tienen los estrictamente profesionales.

P. ¿Su futuro a corto plazo?

R. Mi idea es jugar. Pero no sé dónde. Estoy recibiendo diversas propuestas.

P. ¿Su situación actual?

R. Todo está cambiando para mí de forma muy rápida. Había recibido ofertas antes. Pero ni me las planteaba. Ahora debo cambiar de equipo y, tal vez, de ciudad. Es algo muy brusco. Afortunadamente, un amigo, Pedro Ansa, que se ha ofrecido para representarme.

P. ¿Se arrepiente de no haberlo tenido antes?

R. No. Prefiero que el palo haya sido directo. Me han abierto los ojos.

P. Aun así, no ha señalado un culpable directo.

R. He tenido a varios interlocutores. Fundamentalmente, Alemany. Pero también me reuní con Aíto García Reneses y Josep Lluís Núñez cuando se decía que el problema era únicamente económico. No sé quién es el responsable, pero sí que el motivo es deportivo.

P. ¿Ha hablado con Antonio Díaz Miguel sobre su disponibilidad para ser seleccionado tras dos años de autoexclusión?

R. No, pero pienso hacerlo. Estoy dispuesto a jugar de nuevo con España.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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