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El arcipreste de Irún dio a dos etarras las llaves de su iglesia para que se ocultaran una noche

Aurora Intxausti

El sacerdote José Ramón Treviño, detenido por presunta colaboración con ETA, entregó las llaves de su parroquia a los dos autores del asesinato de tres personas en Cantabria, a los pocos días del atentado, para que pudieran ocultarse una noche. Trevino, arcipreste de Irún (Guipúzcoa), había conocido a uno ellos, Ignacio Rekarte, cuando éste era toxicómano y le ayudó a dejar la droga. El segundo terrorista, Angel Luis Galarza -ambos detenidos-, había perdido en San Sebastián un carné falso de policía con su foto y un vecino lo entregó a las autoridades.

Ignacio Rekarte se sometió a una cura de desintoxicación en el Proyecto Hombre por indicación del cura Treviño, según han informado fuentes policiales. Un portavoz del centro no quiso confirmar ni desmentir ayer la noticia. "Por respeto a las personas que se quieren rehabilitar, nunca facilitamos ese tipo de datos", señaló. El sacerdote había enviado a varios jóvenes de la zona de Irún al Proyecto Hombre, organismo con el que colabora estrechamente.En el último año, el arcipreste ocultó o ayudó a huir en dos ocasiones a Ignacio Rekarte, después de que el etarra hubiese participado en la muerte de cuatro personas, según consta en las diligencias de la Guardia Civil sobre la detención del sacerdote. Treviño fue el encargado de facilitar a Rekarte y a Juan Ramón Rojo la dirección de François Garat, párroco de Espelette (País Vasco francés). En casa de éste estuvieron varios meses refugiados, según consta en las declaraciones efectuadas por ambos a la Guardia Civil. Los dos terroristas habían dado muerte, días antes de su huida, al joven toxicómano de Irún Francisco Gil Mendoza.

Su paso a Francia se realizó días antes de la desarticulación del comando Donosti, el 17 de agosto de 1991, ante las sospechas de que la policía se encontraba rondando la zona en la que operaban. En su precipitada fuga a territorio francés, no tienen tiempo de avisar a su compañero de grupo José Ramón Goñi, hijo del ex gobernador civil de Guipúzcoa José Ramón Goñi Tirapu. Durante su estancia en la casa del párroco francés, Rojo y Rekalde reciben, en el mes de diciembre, la visita de un dirigente de la organización terrorista, con el que acuerdan las condiciones y el momento de su entrada en activo.

El regreso a España de Rekarte y Rojo se produjo en los primeros días del mes de enero. Cada uno de los etarras entró a formar parte de comandos independientes, uno encargado de actuar en Cantabria y otro en Vizcaya. Juan Ramón Rojo fue detenido en Bilbao el 29 de enero, junto a otras personas acusadas de pertenecer a la organización terrorista.

Atentados en Cantabria

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Los liberados del comando Mugarri Ignacio Rekarte y Luis Ángel Galarza realizaron en los meses de enero y febrero varios atentados terroristas en Cantabria, entre ellos la colocación de un coche bomba cuya explosión causó la muerte de tres personas en Santander. Días después se trasladaron a Irún, donde pasaron dos noches con motivo de las fiestas de Carnaval.

Una de ellas pernoctaron en un domicilio particular y otra en la parroquia del Santo Cristo de Artia, de la que es párroco Treviño. Las llaves para acceder a la casa parroquial estaban en un lugar acordado previamente entre el cura y el etarra. Rekalde y Galarza tenían la orden de captar a personas para colaborar con la organización y restablecer la maltrecha infraestructura de ETA en la zona del Bidasoa. Desde el pasado mes de agosto, cuando la Guardia Civil desarticuló al comando Donosti, los grupos de apoyo de la organización tenían dificultades para actuar en esa zona, según fuentes de la lucha antiterrorista.

Durante los días que permanecieron en Guipúzcoa, Ignacio Rekarte visitó a su novia, que reside en Irún, y Luis Ángel Galarza Quirce estuvo paseando por la Parte Vieja de San Sebastián. Un vecino encontró en la calle un carné de policía que entregó en dependencias policiales. El documento era falso y tenía la fotografia de Galarza.

En su declaración ante la Guardia Civil, Rekarte afirma que Treviño sabía que se encontraba huido en Francia tras la caída del comando Donosti. El sacerdote le preguntó "si venía de Vizcaya, refiriéndose casi seguro a que pensaba que como Juanra [Rojo] era su amigo, estaría junto a él en el comando Vizcaya de ETA". Galarza en su declaración ante la Guardia Civil informó que tras dormir en la iglesia "dejaron la! llaves debajo de la mesa del altar", siguiendo las instrucciones del cura, informa Francisco Mercado.

La detención del arcipreste ha provocado un revuelo en la zona del Bidasoa, tanto entre los sacerdotes como entre los vecinos. Los agentes de pastoral de la parroquia del Santo Cristo de Artiga, con la adhesión de todos los colaboradores de las demás parroquias de las que es arcipreste el detenido, enviaron ayer a la Audiencia Nacional un telegrama en el que solicitan la libertad del sacerdote, a quien califican de "hombre bueno".

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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