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'Schaff conection' en Luxemburgo

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) intenta esclarecer, desde hace dos semanas, quién o quiénes están detrás de las sociedades que más activamente vendieron acciones de Sistemas Financieros (SF) entre los meses de marzo y julio de 1990. Una investigación difícil, por el entramado de testaferros y entidades de todo tipo que aparecen en los registros, que se complica más todavía al estar algunas de estas sociedades domiciliadas en países considerados como paraísos fiscales en los que el secreto bancario es una barrera casi infranqueable.Este es el caso de Schaff Investments, de la que la CNMV ha pedido información puntual a las autoridades de Luxemburgo. Esta sociedad vendió en junio de 1990 38.500 acciones de SF, por valor de 184 millones de pesetas, según informó el presidente de la Comisión de Valores, Luis Carlos Croissier, en el Congreso de los Diputados. Aunque en la CNMV se tiene la sospecha -casi la certeza- de que detrás de esta sociedad se encuentran algunos de los socios y buenos clientes de Ibercorp, las investigaciones llevadas a cabo hasta la fecha tan sólo han permitido confirmar que el apoderado de esa sociedad era Carlos Pittaluga Jiménez, primo hermano del gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, accionista y secretario del consejo de administración de alguna de las sociedades del Grupo Ibercorp.

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Ordenes de venta

Según ha podido saber este periódico, el propio Pittaluga ordenó, mediante carta fechada el 7 de junio de 1990, al Banco de Progreso -del Grupo March- que "de acuerdo con nuestra conversación telefónica, les ruego procedan a la venta de los títulos de Sistemas Financieros que tenemos depositados en su entidad a razón de 5.000 a 6.000 títulos diarios. Les solicitamos asímismo que procedan a efectuar la venta a través de Ibercop Sociedad de Valores y Bolsa". Estos títulos habían sido depositados por Schaff Investments en el Banco de Progreso con fecha 18 de enero del mismo año -apenas seis meses antes de ordenar la venta- y el contrato de fue firmado por el Carlos Pittaluga Jiménez, con DNI número 5.241.986, en calidad de apoderado de la sociedad, Con domicilio en Boulevard Royal 13 de Luxemburgo.Siguiendo este rastro, EL PAÍS ha podido saber que en el registro de sociedades de Luxemburgo figura la escritura de constitución de Schaff Investments, firmada el 27 de agosto de 1987 en la oficina del notario Paul Frieders. Según ese documento oficial, son propietarios de esa sociedad -que nació con el nombre de Bahía Blanca S.A. y cambió a Schaff Investments el 16 de mayo de 1988- dos abogados luxemburgueses: Corinne Philippe (20% del capital) y Marthe Feyereisen (80%). El capital social es de 150.000 dólares (15 millones de pesetas) y su objeto social es la compra-venta de acciones. Como muchas otras sociedades instrumentales domiciliadas en paraisos fiscales, los abogados que constan como propietarios son testaferros de inversores españoles.

Según informa Félix Monteira desde Bruselas, el abogado Feyereisen no ha querido hacer ninguna declaración, a solicitud de este periódico, sobre la citada sociedad, ni sobre las operaciones que están siendo investigadas por la CNMV.

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