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Desarticulada una importante organización del 'cártel de Medellín', con 278 kilos de cocaína pura

Juan Carlos Betancour Alzate, hombre de confianza en España del narcotraficante colombiano Severo Escobar, actualmente detenido en Suiza, fue arrestado el lunes en Madrid por agentes de la Brigada Provincial de Estupefacientes, al culminar una larga investigación que ha permitido la aprehensión de 278 kilogramos de cocaína pura. Severo Escobar, de 30 años, es sobrino del gran capo de la cocaína Pablo Escobar Gaviria. Otros 11 colombianos y un venezolano están detenidos a raíz de esta operación, que supone un duro golpe a las actividades del cártel de Medellín en España.

La operación que condujo a la detención de Batancour comenzó hacia las nueve de la mañana del lunes frente al número 43 de la calle Alberto Alcocer. Agentes de la Brigada Regional de Estupefacientes presenciaron a esa hora cómo un colombiano de 37 años llamado Mario Hernández Sepúlveda, alias Jairo, recibía un paquete que parecía contener droga de otro sujeto que salía de la finca citada. Los policías procedieron a su detención inmediata.Ambos sujetos eran sobradamente conocidos por los miembros de la brigada, que les seguían la pista desde unos dos meses y medio antes, según informó ayer el jefe superior de Policía de Madrid, Manuel García Linarejos, en rueda de prensa. El que ocupaba un apartamento en el 43 de Alberto Alcocer se llama Gerardo Giraldo Suárez, Toño, de 49 años.

En el transcurso de esta dilatada investigación, la policía había localizado ya una serie de pisos situados en barrios caros de Madrid, como Puerta de Hierro, Arturo Soria o el Paseo de la Habana, que los integrantes de esta banda utilizaban como simples almacenes o como vivienda. Diez de esos locales fueron registrados durante la jornada del lunes, tras la detención Jairo y Toño.

En uno de estos pisos, situado en el número 7 de la calle Alejandro Casona, en Puerta de Hierro, aparecieron la mayoría de los 278 kilogramos de cocaína aprehendidos. La droga, distribuida en paquetes de un kilogramo marcados con e rótulo "Jet. Pureza 100%. Pro dueto de Colombia", hubiera representado, según fuentes policiales, unos 2.000 kilogramos de cocaína, una vez cortada con un valor de mercado de unos 26.000 millones de pesetas.

Los mismos registros, que se prolongaron hasta la madruga da de ayer, permitieron la detención de otros 11 integrantes de la banda, y entre ellos de Juan Carlos Betancour. Éste era bien conocido por la policía española al menos desde que, el pasado mes de octubre, se trasladó a Lugano para preparar la llegada a dicha ciudad suiza de Severo Escobar IV, sobrino de Pablo Escobar e hijo de Severo Escobar III, condenado por narcotráfico a 30 años de cárcel en Estados Unidos. Betancour hizo aquel viaje acompañado de Adrián Antonio Cardona Palacios, Alex, también detenido el lunes en Madrid.

El objetivo del viaje de Escobar, considerado en medios policiales como el número seis de la cocaína en el mundo y posiblemente el número uno en Europa era vender en Suiza parte del importante stock de droga que Betancour almacenaba en España. La operación fracasó, porque los presuntos compradores eran agentes de la policía suiza, que, finalmente detuvieron a Escobar junior en Lugano, el pasado 29 de noviembre, cuando Betancour ya había regresado a España. En la habitación de Escobar aparecieron tres kilos de cocaína llevados desde España a Lugano para que los clientes suizos analizaran su pureza. Se da la circunstancia de que otro hermano de Betancour, llamado Iván Darío, está encarcelado en Bélgica por otra operación fracasada debido a una infiltración de la policía.ç

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Aviones militares

El seguimiento de la red de Escobar junior, en el que han participado policías de España, RFA, Suiza y, en menor medida, Holanda, facilitó la aprehensión de otra partida de 250 kilos de cocaína pura, el pasado 26 de septiembre en Stuttgart.Según confidencias de los narcotraficantes a los agentes que les infiltraron, su poderosa organización había llegado a utilizar aviones de la Fuerza Aérea colombiana para introducir pasta de cocaína en España, que luego era almacenada y procesada en Madrid y Galicia. La policía española descubrió el pasado 8 de noviembre restos de un laboratorio clandestino en Vilanova de Arosa, como consecuencia de una investigación en la que participaron agentes de la RFA. El empleo de aviones colombianos para el narcotráfico no ha podido, en cambio, ser demostrado.

El jefe superior de policía de Madrid estimó, por el contrario, que, dada la importancia del alijo capturado el lunes, "lo más probable es que haya sido introducido por vía marítima". Portavoces policiales explicaron igualmente que no se han detectado conexiones de la organización desarticulada con ciudadanos españoles ni cuentas bancarias a nombre de los detenidos, que, presumiblemente, proyectaban sacar el dinero en maletas. Junto a la droga, fueron hallados 22 millones de pesetas.

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