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La Casa Blanca, dispuesta a "explorar" una oferta de mediación de Rafsanyani

El presidente George Bush se declaró ayer dispuesto a "explorar" una sorprendente oferta de mediación del nuevo presidente iraní, hoyatoleslam Hachemi Rafsanyani, para liberar a los rehenes occidentales en manos de fundamentalistas islámicos en Líbano, mientras unidades navales norteamericanas mantenían sus posiciones en el Mediterráneo oriental y en el océano Índico, dispuestas a intervenir en caso de producirse un agravamiento en la crisis.

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La oferta de intervención de Rafsanyani, hecha ayer por la mañana en Teherán- acompañada de una apelación a Washington para que desista de emprender cualquier acción de fuerza-, fue estudiada en el curso de una reunión, la cuarta desde el lunes, mantenida por Bush en la Casa Blanca con sus máximos asesores de seguridad nacional.En declaraciones a los periodistas, Bush se declaró satisfecho por "el extiraordinario ejercicio de diplomacia" desplegado por su Administración con motivo de la crisis de los rehenes, calificado por el portavoz presidencial, Marlin. Fitzwater, del más amplio llevado a cabo en los últimos años, y anunció su disposición de "hacer cualquier cosa" para liberar a los ocho rehenes norteamericanos en manos de grupos proiraníes en el Líbano. Desde el comienzo de la crisis, Bush ha mantenido 11 conversaciones telefónicas con otros tantos líderes mundiales, desde la primera ministra británica, Margaret Thatcher, al presidente argelino, Chadli Benjedid, pasando por el papa Juan Pablo II.

[El embajador argelino en Líbano, Al Kaded al Hasnawi, declaró anoche a la agencia Reuter que su país está negociando la liberación de todos los rehenes occidentales y se mostró esperanzado en la intervención de Rafsanyani. "Es un hombre racional que cree en el diálogo"" opinó.]

Preguntado por su reacción ante la intervención de Teherán en la suspensión de la sentencia de muerte dictada contra el rehén Joseph Cicippio, Bush contestó que le "complacía que el brutal asesinato" que iba a cometerse en la persona de Cicippio hubiera sido "descartado". "Cuando veo una declaración [como la de Rafsanyani] que abre las puertas a la esperanza, la exploro hasta el fin", añadió. Los secuestradores de Cicippio, encuadrados en la llamada Organización de Justicia Revolucionaria, anunciaron el jueves que congelaban su ejecución, a la vez que pedían la liberación del dirigente fundamentalista, jeque Abdelkarim Obeid, secuestrado por Israel.

La amenaza terrorista de seguir ejecutando rehenes norteamericanos si no consiguen la liberación de Obeid, jefe de las organizaciones proiranles en el sur del Líbano, hace que el Pentágono mantenga unidades de la VI Flota estacionadas en el Mediterráneo oriental, nientras que una flotilla formada por el portaviones América y siete navíos de escolta navega con dirección al océano Indico.

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Entre tanto, The New York Times revelé ayer que Bush hubiera ordenado una acción de represalia con aviones de la VI Flota contra las bases terroristas en Baalbeck -donde además de las milicias shiíes hay 2.000 guardias revolucionarios iraníes- en caso de que Cicippio hubiera sido asesinado.

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