Unilever compra Fabergé y Elizabeth Arden por 1.550 millones de dólares
La compañía anglo-holandesa Unilever, productora de bienes de consumo (alimentos, detergentes y artículos para el cuidado personal), anunció ayer la compra de Fabergé y Elizabeth Arden, firmas de cosméticos norteamericanas, por 1.550 millones de dólares. La operación, que ha sufrido grandes altibajos desde que se iniciara hace más de un año, será efectiva dentro de 30 días. Fabergé, dedicada a los productos de tocador, y Elizabeth Arden, con sus perfumes y cremas, son propiedad de Riklis Family Corporation y operan en Nueva York.Con esta adquisición y la de Calvin Klein Cosmetics Corp, otra firma estadounidense, la pasada semana, Unilever se afianza en el mercado de los productos de belleza.
Según los dos directores de la multinacional, el inglés, M. R. Arigus y el holandés, F. A. Maljers, el núcleo de ventas de la compañía está en Europa, y por eso el salto hacia los perfumes y cremas tenía que darlo en Estados Unidos, donde ahora quieren afianzarse. En 1988, este mercado, compuesto por productos para la piel, maquillajes y colonias, registró unas ventas de 20.000 millones de dólares.
La estrategia desplegada por Unilever lleva camino de convertirla en el mayor productor mundial de perfumes, como ya lo es de margarina. A las tres marcas ahora adquiridas, se suma Passion de Elizabeth Taylor, que ya se vende en Europa, Cerruti, Scherrer y Evyan (White Shoulders).
La Bolsa de Amsterdam, reflejó ayer su sorpresa por la compra, subiendo la cotización de Unilever 1,40 florines.
