La cadena de tiendas Kanguro pasa a estar controlada por administradores judiciales
El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Alcalá de Henares ha designado administradores judiciales para la cadena de distribución Kanguro Grandes Superficies. La empresa era gestionada desde finales del año pasado por la sociedad Unión Alimentaria Española (UAE), compañía dirigida por Luis Garay. Kanguro presentó suspensión de pagos el pasado 23 de julio, declarando unas deudas de 3.727 millones de pesetas frente a un activo por valor de 4.078 millones, de acuerdo con las fuentes consultadas.
La administración judicial de Kanguro supone un hito clave para las expectativas de cobro de los acreedores de la sociedad, dado el deterioro que viene padeciendo la compañía desde que el pasado mes de enero Unión Alimentaria Española, que también es titular de un contrato de suministro en exclusiva, suspendió las entregas a las tiendas. En la actualidad, algunos de los más de 20 establecimientos de la cadena se encuentran totalmente desabastecidos.El nombramiento de administradores judiciales coincide con la finalización del plazo, que venció el pasado viernes, para la presentación del dictamen referido a la suspensión de pagos por parte de los interventores. En el supuesto de que el dictamen modifique el balance presentado por los gestores en el expediente de suspensión de pagos, estableciendo una cifra de pasivo superior a la de activo, Kanguro se vería abocada a una situación que exigiría el afianzamiento de nuevos recursos financieros por parte de la propiedad. Ésta sería la única garantía que podría asegurar el equilibrio patrimonial de la sociedad. Kanguro cuenta con cerca de 2.000 acreedores, incluidos Hacienda y la Seguridad Social. A raíz de la suspensión de pagos, la gestión de Kanguro Grandes Superficies fue asumida por la compañía Unión Alimentaria Española, fundada a mediados de 1987 mediante la integración de una serie de empresas dedicadas a la comercialización de productos alimenticios y detrás de la cual aparece el nombre de Luis Garay, quien ha tratado infructuosamente de asegurar los suministros a las tiendas de la cadena comercial. Unión Alimentaria Española adquirió la administración de Kanguro en virtud de una opción de compra establecida con la firma General Promotora de Inversiones, antiguo accionista mayoritario de la cadena comercial. De esta forma, Luis Garay pasó a controlar Kanguro y se convirtió también en el principal proveedor de la empresa de distribución.
En realidad, el máximo responsable de UEE ha actuado como intermediario entre Kanguro y los proveedores tradicionales de la sociedad, consiguiendo mantener los suministros hasta finales del pasado año. Sin embargo, a partir de enero, las entregas han quedado prácticamente paralizadas, rompiendo las expectativas de la compañía de distribución. Ahora, a la vista de los acontecimientos que han desembocado en la administración judicial de la sociedad, la única alternativa viable parece ser la venta de las tiendas, la mayor parte de las cuales son ocupadas en régimen de contratos de arrendamiento.
