Un FBI a la europea
La supresión de las fronteras internas de la CE supone un fortalecimiento de las externas y, para llevarlo a cabo, España se dispone a proponer a sus socios comunitarios la creación de una policía europea supranacional parecida a la policía federal existente en Estados Unidos (FBI)."Esta idea queda recogida en nuestro documento", afirmó Rafael Pastor, que representa a España en un grupo de altos funcionarios encargado por el Consejo Europeo de Rodas de coordinar los trabajos de los comités que preparan el desmantelamiento de las fronteras intracomunitarlas previsto para el 1 de enero de 1993.
A pesar de que va a quedar, por primera vez, plasmada en un documento de trabajo que Pastor remitirá el 22 de febrero en Bruselas a los otros once coordinadores, la idea de poner en pie esa policía transnacional no es española, sino alemana, y fue formulada en público en la capital belga por el canciller alemán occidental, Helmut Kohl, antes de que el presidente Felipe González se hiciese eco de ella en la alocución que pronunció el diciembre antes las Grandes Conferencias Católicas belgas.
"La policía", insistía Kohl a finales de enero, "no puede seguir cojeando detrás de unas organizaciones criminales que andan a grandes zancadas porque están muy bien organizadas por encima de las fronteras". Poco antes, su ministro del Interior, Friedrich Zimmermann, y el pasado fin de semana el presidente de la Oficina Federal de la Policía Judicial (BKA), Heinrich Boge, pedían que se conceda cuanto antes a las policías nacionales un derecho de persecución en el resto de la CE.
La abolición de las fronteras físicas implica también desde la elaboración de una política común de extranjería (visados, derecho de asilo, residencia y expulsión) hasta la creación de un espacio judicial europeo. Una de las ideas novedosas del documento de Pastor es la necesidad de armonizar los procedimientos de extradición. Sugiere inspirarse en la convención sobre la materia del Consejo de Europa, que agrupa a todos los países democráticos de Europa.
Las divergencias de criterio sobre las extradiciones ensombrecieron el Consejo Europeo de Rodas. La primera ministra británica, Margaret Thatcher, aseguró que se siente insultada por la negativa del Gobierno belga de extraditar al ex sacerdote irlandés Patrick Ryan, al que Londres acusaba de haber suministrado armas al Ejército Repúblicano Irlandés (IRA). Ryar fue expulsado de Bélgica a la República de Irlanda.
Dentro de dos semanas, los doce coordinadores darán un primer repaso al documento, y el subsecretario de la Secretaría de Estado para las Relaciones con la CE tiene la intención de convocar al grupo tres veces cada dos meses hasta que, a principios de junio, tenga listo un libro blanco sobre la cuestión que será sometido a la cumbre europea de Madrid. "Es de esperar que de un impalso político al proceso de desmantelamiento de fronteras" comentó el embajador de España ante la Comunidad, CarIos Westendorp.
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