Se estrella en Zaragoza el primer F-18, valorado en 2.600 millones
Un avión F- 18 de la Fuerza Aérea Española, perteneciente al Ala 15, con sede en la base de Zaragoza, se estrelló a primera hora de la tarde de ayer a unos 15 kilómetros del centro de la ciudad, en un paraje cercano a un polvorín del Ejército y a otros lugares habitados. Resultó ileso su único ocupante, el capitán del Ejército español Ignacio Azqueta, que pudo lanzarse en paracaídas.La primera impresión de este piloto es que se produjo el fallo de un motor. Es la primera vez que sufre un accidente uno de los 72 aviones F-18 entregados a España a partir de noviembre de 1986, en el programa FACA, por la empresa McDonnell Douglas.
El suceso ocurrió sobre la una de la tarde en la sierra de la Muela, a unos 15 kilómetros del centro de Zaragoza. El piloto, hijo del general Luis Azqueta, que dirigió la mayoría de los estudios técnicos sobre el programa FACA, avisé momentos antes a la torre de control de la base de que tenía problemas e intentaba regresar. No le dio tiempo y, tras saltar en paracaídas, el aparato se precipitó a tierra y se incendió. El avión quedó totalmente desintegrado, y sus restos, esparcidos en un radio de un kilómetro, en un terreno de rastrojos, sin cultivar.
El F-18 realizaba un vuelo de instrucción, con salida y regreso a la base de Zaragoza, que se encuentra muy próxima al lugar donde se estrelló el avión. El piloto fue: recogido por un helicóptero español y trasladado a la base. Acudieron al lugar 10 unidades de los, bomberos de Zaragoza, que sofocaron las grandes Bamaradas que desprendía el aparato, y la Guardia Civil acordonó toda la zona.
Fuerte desánimo
El piloto del avión accidentado es hijo del general Azqueta, que seleccionó el F-18
Entre los mandos del Ejército del Aire, según Defensa, existía ayer un fuerte desánimo por el accidente ocurrido, sobre todo porque se ha producido antes incluso de que esté operativa la primera unidad formada de ese tipo de aviones, que tiene su base en Zaragoza. Otra unidad de combate con ese mismo de avión tendrá su base en Torrejón (Madrid).De acuerdo con el contrato firmado entre Estados Unidos y España en junio de 1983, los aviones F-18 que puedan perderse por accidente u otras causas deben ser repuestos por Washington, aunque en principio pagados por el Gobierno español.
No obstante, un equipo especial de Seguridad en Vuelo del Ejército del Aire, en colaboración con expertos de McDonnell Douglas -la firma fabricante, con sede en Sant Louis (Estados Unidos)- tendrá que investigar en profundidad el origen del siniestro para determinar si se ha debido a un error del piloto, una mala operación de mantenimiento o un fallo de los sistemas del avión. Si se llega a esta última conclusión, España intentará que el nuevo aparato sea pagado por Estados Unidos.
El programa FACA (Futuro Avión de Combate y Ataque) tuvo un coste para España de 300.000 millones de pesetas, y fue cerrado en 1983 entre el Gobierno socialista y la compañía estadounidense McDonnell Douglas.
Nicolás Sartorius, diputado de Izquierda Unida, presentará hoy en el Congreso una interpelación y pedirá que se suspendan los vuelos de prácticas con los aviones F-18 hasta que se aclare el accidente.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
