La distensión, a debate en los cursos de verano de la Complutense
La confusión en que se hallan los Gobiernos europeos occidentales ante las perspectivas que plantea la distensión entre las superpotencias y la necesidad de un debate sobre la posible ampliación del proceso de integración europea, son algunas de las consecuencias de los recientes acuerdos alcanzados por Ronald Reagan y Mijail Gorbachov. Así lo destacaron ayer Juan Luis Cebrián, director de EL PAÍS y el teniente general Juan Cano Hevia en las conferencias que ambos celebraron ayer en El Escorial, en el marco del curso de verano de la Universidad Complutense titulado Los acuerdos Reagan-Gorbachov: la nueva estrategia mundial. El director del seminario es el eurodiputado y ex ministro español de Asuntos Exteriores Fernando Morán.El teniente general Juan Cano Hevia, señaló que la unidad europea es uno de los efectos de la distensión. Este factor, subrayó, puede "poner sobre el tapete una cuestión que hasta ahora ha permanecido olvidada en las discusiones de política internacional", refiriéndose a lo que el general De Gaulle resumió en su frase: "Europa llega hasta los Urales". La aproximación entre los países europeos a uno y otro lado del telón de acero fue desarrollada por Juan Luis Cebrián, quien recalcó los titubeos y temores que está suscitando entre los gobiernos europeos occidentales los cambios estructurales que plantea un eventual fin de la confrontación de los bloques y de los sistemas totalitarios en la Europa del Este. "El diálogo entre las superpotencias, ha operado unos cambios en la cultura del enemigo vigente desde los años cuarenta y clave de las reglas del juego de la política internacional a la que están acostumbrados", dijo Cebrián. "El resultado es el desconcierto de los gobiernos europeos que no saben qué hacer y si deben fiarse o no de Gorbachov y su política de reformas en la URSS", añadió.
Los intentos de Francia de moderar la cooperación puesta en marcha entre ambas Alemanias o la falta de una postura firme a la hora de que los países europeos occidentales apoyen el proyecto democratizador de Solidaridad en Polonia son, según Cebrián, algunos ejemplos que reflejan esta confusión.
A estas contradicciones contribuye en su opinión el debate abierto como consecuencia de la distensión a nivel estratégico, en especial sobre la necesidad de nuclearizar Europa tras una eventual retirada militar norteamericana del continente, para contrarrestar la superioridad soviétíca en armamento convencional. Cebrián criticó la falta de un debate en el Parlamento español así como la escasa información de los partidos políticos de nuestro país sobre estos temas, que en su opinión afectan al papel que España va a jugar en el marco internacional.
