El senador González Bedoya, golpeado en el consejo del 'Alerta'
El consejero de Alerta Juan González Bedoya, senador socialista, fue agredido a mediodía de ayer en las instalaciones del periódico por Víctor Fernández de Bobadilla, hermano del empresario riojano José Antonio Fernández de Bobadilla, quien posee el 45% de las acciones de la empresa editora. Varios redactores que trabajaban en ese momento en el periódico fueron testigos del incidente.El consejo de administración, del que no forma parte el agresor, se hallaba reunido en aquellos momentos. La Policía Nacional intervino para zanjar el altercado tras ser solicitada por teléfono su presencia.
El incidente se enmarca en el clima de enfrentamiento entre Fernández de Bobadilla y los demás consejeros, entre ellos el secretario general del PSOE de Cantabria, Jaime Blanco, y el propio González Bedoya. El partido posee el 26% de las acciones, y Fernández de Bobadilla pretende desde hace tiempo la ampliación de capital; quisiera dar un giro total a la tendencia partidista de Alerta y convertirlo en un periódico plural y de carácter exclusivamente empresarial.
Estudio de mercado
Al parecer, el conocido empresario de prensa francés Robert Hersant está dispuesto a realizar una fuerte inversión en la empresa, y un equipo económico de aquél llevó recientemente a cabo un estudio de mercado en Cantabria tras el cual llegó a la conclusión de que los beneficios que Alerta obtiene están muy lejos de alcanzar el techo de sus posibilidades.
El diario montañés, según la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD), supera actualmente en 4.000 ejemplares a Alerta, que fue en el curso de las últimas décadas el periódico hegemónico de la región hasta su adquisición por la empresa Canpresa cuando el Estado, en 1984, sacó a subasta los antiguos periódicos de propiedad pública.
En una asamblea de trabajadores celebrada el jueves último, el director comercial de Alerta, José María Núñez, reveló que una gestoría fundada por el actual presidente del Consejo de Administración, Ciriaco Díaz Porras, con el que Fernández de Bobadilla mantiene serias discrepancias, había comprado a lo largo de los últimos meses 5.000 ejemplares diarios del periódico para enmascarar, de cara al control del OJB, la real difusión y venta del diario.
Los hermanos Fernández de Bobadilla, tras el incidente registrado en el periódico, mostraron su propósito de dirigirse al juzgado para presentar una denuncia ante la imposibilidad de acceder a los libros contables de la sociedad. A su vez, contra Víctor Fernández se ha presentado denuncia por agresión.
En el curso de los últimos días, José Antonio Fernández de Bobadilla había manifestado a algunos miembros del comité de empresa que no estaba dispuesto a tolerar por más tiempo la presente situación y sí a poner término al "coto cerrado" del senador González Bedoya.
