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Entrevista:EL TOUR LLEGA A SU FIN

"Delgado nunca ha dado positivo"

Luis Puig, presidente de la UCI, vivió a fondo el polémico caso

Luis Gómez

LUIS GÓMEZ ENVIADO ESPECIAL, Luis Puig es el presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI). Es también español, y su intervención en la solución del caso Delgado parece haber sido decisiva, pero puede haber hipotecado su futuro porque la Prensa oficial del Tour ha insistido en que Puig actuó más como español que como presidente de la UCI. De cualquier manera, Puig está en disposición de conocer las verdaderas claves que han provocado un escándalo de este tipo. Unas claves que desvela muy a medias, en las que se esconde una feroz batalla por dominar el ciclismo profesional. Y otras claves, la verdad sobre el doping en uno de los deportes que más esfuerzo requiere del practicante, permanecen en su archivo personal.

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Luis Puig deja entrever en la charla algún que otro caso polémico del pasado, como cuando, refiriéndose al ex corredor francés Bernard Hinault, cinco veces campeón del Tour, sostiene que "él, precisamente él, es quien menos cosas tiene que decir sobre estos asuntos". Puig afirma categóricamente que Delgado nunca fue positivo.Pregunta. Da la sensación, generalmente compartida, de que Delgado, fundamentalmente, ha sido una víctima de una guerra declarada entre la Unión Ciclista Internacional (UCI) y la organización del Tour.

Respuesta. La palabra víctima encaja. Ha sido una víctima, pero debido a una serie de circunstancias que le han involucrado, no preparadas, pero sí aprovechadas. Quiero decir que, concretamente, Pedro Delgado no ha dado positivo. Legalmente nunca ha dado positivo.

P. ¿Tuvo usted que adelantar su viaje a Francia por esta causa?

R. Tenía interés en seguir un par de etapas, y, desde luego, bendigo la hora en que llegué a Limoges y en vez de vivir una faceta deportiva tuve que vivir una faceta federativa.

R. A mí me llega a Valencia por una llamada a las doce de la noche del director del equipo Reynolds.

P. ¿Le pide ayuda?

R. Me explica la situación en que se encuentra y me pregunta qué es lo que puede hacer. Mi consejo lógico es decirle si ha recibido el comunicado. Me dice que sí. Le digo si sabe la sustancia. Me dice que en el comunicado no está porque ha sido una comunicación telefónica, pero que conoce la sustancia. Me dice la sustancia y mi consejo es que inmediatamente pida el contraanálisis.

P. ¿En ese momento, usted sabe si la sustancia no está en las listas de la UCI?

R. En ese momento, no. No sabía nada. Pero también me entero de que el director de la prueba le pide al director del equipo Reynolds que no pida el contraanálisis para evitar que se difunda la noticia y que se organice una polémica, que él dice que va en contra de la imagen del Tour.

Alarma

P.¿Cuándo se alarma ante lo que está sucediendo?, porque lo que está sucediendo no es lo habitual en estos casos

R. Me alarmo cuando veo que en la comunicación del director hay una irregularidad. Es una comunicación telefónica; es luego una visita personal, acompañado del presidente del jurado internacional. Y éste no es el cauce normal.

P. ¿Por qué cometieron un error tan ingenuo?

R. Quizá ellos pensaban que era un positivo y querían evitar que se produjera un escándalo. Por eso le pidieron que lo aceptara, que no fuera al contraanálisis, y poco menos le querían poner en situación de que abandonara la carrera.

P. Lo que sí se advirtió es que la organización tenía demasiada prisa por acabar este asunto. Incluso convoca una reunión con los dos equipos en situación extraña, en la misma orilla del lago de Burdeos. ¿Por qué esa prisa?

R. No podría concretarlo. Pero puedo decir que era lógica en el momento en que se produjo la comunicación irregular. El comisario de control debió coger la lista de productos prohibidos por la UCI, ya que, aunque sea de palabra, le dieron el producto, ver si esa sustancia estaba dentro de esa lista, y, si no estaba, haber cogido el comunicado, haberlo metido dentro de la carpeta y, simplemente, haberle dicho a la organización que, como esta sustancia no está en la lista, esto no es positivo. Como la reglamentación dice que toda comunicación debe ser secreta, que el primero en enterarse debe ser el corredor, lógicamente esto hubiera quedado archivado y no se hubiera enterado nadie, porque no había positivo, que ésa era la realidad. Y, lógicamente, ahí se habría terminado el problema.

P. Pero se organiza.

R. Por una filtración que es ya un defecto de forma por el que se puede recurrir contra la disposición del positivo.

P. Sin embargo, parece que el Reynolds se ve presionado a evitar un recurso legal e ir a un recurso digamos que químico para demostrar que esa sustancia no la tomó para enmascarar anabolizantes.

R. Eso yo no lo puedo concretar. Pero yo llego a Limoges en el momento en que todo está revuelto. Ése ha sido mi problema.

P. Y se pide el contraanálisis.

R. Sí, porque es la base legal para poder llegar a una conclusión definitiva, dado que era del conocimiento público que a Pedro Delgado se le había comunicado un positivo, que no era verdad y no existía.

P. Durante la mañana en que se está produciendo el contraanálisis siguen las presiones. ¿Podría concretarlas?

R. Hay presiones a todos los niveles. Y hay una acertada o equivocada opinión de la organización de que un maillot amarillo del Tour con un positivo debe simplemente abandonar su defensa, cuando es incomprensible que un señor que no ha tomado una sustancia dopante él mismo reconozca que el positivo es cierto.

P. En esa mañana lo que sí se pone en claro es el conflicto latente entre la UCI y la organización.

R. La UCI sí lo tiene claro. El producto no está en su lista y es válido. Pero entonces se complica, porque se saca a relucir un acuerdo establecido en una reunión por los presidentes de las comisiones médicas, que para evitar diferencias de listas llegaron al acuerdo de tomar, de tomar, insisto, como base la lista del Comité Olímpico Internacional (COI), pero no al pie de la letra. Entonces, el laboratorio de París dice que aplica la lista del COI y él da esa sustancia como positivo, y esto es lo que ya complica el problema.

P. Pero, por encima de este caso, se habla de un conflicto de poder entre la UCI y la organización. ¿Ha sido esto?

R. Los medios de comunicación lo han dicho, pero creo que esto era

un tema aparte; eso de la guerra de fechas, de que el Tour quiere ser más importante que los demás, no ha entrado para nada en el desenvolvimiento de este tema del control.

P. Pero ha tenido su trascendencia, porque la organización del Tour de Francia ha querido echarle un pulso a la UCI, por las prisas que se ha dado, por el empeño que ha tenido en demostrar que Delgado era culpable.

R. Exactamente.

P. ¿Por qué la UCI se había puesto en su defensa?

R. Era el papel de la UCI, porque lo que no admite la UCI es que el Tour sea una prepotencia perfecta en toda su organización. Yo al Tour lo quiero mucho, porque me he educado, como director y como periodista, en el Tour. Ha sido mi escuela. Pero yo no puedo, como presidente de la UCI, admitir prepotencias que no sean realidad.

P. Entonces, ¿qué quejas tiene el Tour?.

R. Si alguna queja tiene es la búsqueda por nuestra parte de un reajuste de fechas para crear espacios que den, en primer lugar, descanso a los corredores entre las grandes pruebas, y en segundo lugar, la posibilidad de habilitar fechas en una fase clave del calendario para una posible carrera de otro ámbito o en otro continente.

Hinault

P. Al día siguiente de la resolución de este caso se pudieron leer en la Prensa oficial del Tour duras declaraciones contra Delgado, un artículo del director y hasta unas declaraciones de Bernard Hinault diciendo que Delgado era líder gracias a la UCI, pero no un limpio ganador.

R. Permítame un apéndice diciendo que Hinault es el único que no puede decir esas cosas.

P. Esto hace pensar que puede haber una campaña de Prensa y que le van a hacer la vida imposible a Delgado hasta París.

R. No lo creo. Conozco al director del Tour, el señor Courcol, que me parece lo suficientemente inteligente como para haberse dado cuenta de que ése no es el camino. Y me refiero al máximo responsable. No puedo hablar de los mandos intermedios.

P. ¿Y usted no se ha hipotecado por defender a Delgado?.

R. En absoluto. Soy un hombre ético. Y en este momento estoy defendiendo a Kíni Andersen, pese a que la UCI no puede intervenir en la sanción que se le ha impuesto a perpetuidad. Pero me parece una injusticia que a un corredor profesional se le sancione por vida por tres controles positivos que ha dado. Y Kim Andersen no es español.

"Quizá con Levitan esto no habría pasado"

Pregunta. ¿La Société Tour de France ha cambiado mucho desde la marcha de Félix Levitan?Respuesta. No ha cambiado. Es fuerte, con capacidad, pero está en un momento de transición en el que el año pasado figuraba un director general; este año, otro director general... Está en un niomento de transición y aún no ha encontrado su mano de hierro.

P. Mucha gente lo que opinaba es que esto con Levitan no hubiera pasado.

R. Eso no se puede decir, pero quizá no habría pasado.

P. Hay quien piensa que, dada la batalla entre el Totir y la UCI, y dada la importancia de las carreras que organiza el Tour, puede producirse un cisma en el ciclismo mundial.

R. No lo creo. Vuelvo a decir que la Société sabe, y aunque no hay nadie de la experiencia de Levitan, que ése no es el camino que les pueda ofrecer un resultado positivo.

P. Con Levitan, las cosas eran más fáciles o lo parecían, porque Levitan, que no amaba precisamente el Giro, dejaba funcionar la Vuelta a España y mantenía así un equilibrio. Y estableció así un orden.

R. Exactamente.

P. Que funcionaba.

R. Exactamente.

P. Pero a los nuevos gestores de la Société se les ve animo de aliarse con el Giro y crear un nuevo contrapoder, con la Vuelta a España en situación muy marginal.

R. No lo creo. Tal vez, al presentar algunos problemas, quieran jugar los dos sin tener en cuenta la Vuelta. Eso es posible, pero no creo que la intencionalidad sea perjudicar a la Vuelta, sino obtener unos beneficios para ellos como los dos más fuertes.

P. De todas formas, parece lógico que el Tour de Francia, siendo la carrera número uno, haga eso.

R. Pero tenga en cuenta una cosa. El privilegio que tiene el Tour, obtenido gracias a una gestión muy hábil de Levitan, y que le ha dado siempre la supremacía sobre todos, se basa en varias cosas. Primero se habla de la cantidad de medios de difusión que van al Tour. Tenga en cuenta que el Tour tiene cogidas unas fechas en las que la actividad deportiva de elite está suspendida, y concretamente uno de los deportes que más llenan, que es el fútbol. Esto ya es suficiente para decir que tiene un gran privilegio. En segundo lugar, Félix Levitan logró que el Tour, en las fechas en que se celebra, no coincidiera con ninguna carrera importante, con lo cual puede poner en línea de meta a los inejores corredores del calendario internacional. Con eso es ya más que suficiente para decir que el Tour tiene los suficientes privilegios para estar contento dentro del calendarío. Un día más o menos en su desarrollo, no tiene importancia.

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