Luguillano no se perdona sus fallos
, David Luguillano se mostraba muy contrariado tras el festejo por no haber matado pronto a su primer novillo: "No me perdono estos fallos, no me los perdono", repetía. El diestro de Valladolid seguía con su fuerte autocrítica al comentar que le era muy necesario un triunfo en Las Ventas. "Lo he tenido muy cerca", señalaba, "después de someter al difícil novillo y torear como agrada aquí , con gusto y ortodoxia , aunque puedo estar mucho mejor. Pero cuando comencé a fallar con el estoque, que se dobló y ni me enteré, perdí totalmente los nervios.
Piropeaba al público de Las Ventas porque creía que se iba a meter más con él por lo de la espada y volvía a censurarse: "Mira que fallar así en Madrid, cuando llevaba una excelente racha con la espada", y concluía añadiendo que creía haberse hecho acreedor a otra oportunidad en Las Ventas.
No coincidía José Luis Ramos en la valoración del público: "Lo he encontrado demasiado frío, como la tarde". El salmantino indicaba que con novillos tan faltos de casta y fuerzas no se podía hacer otra cosa que estar digno ante ellos. "Al menos me queda el recuerdo de una gran estocada", decía, "y la esperanza de mi próxima actuacion el día 23".
También Juan Cuéllar confiaba en volver a Las Ventas, donde ya ha hecho el paseíllo en siete ocasiones: "Después de esta tarde mi cartel no ha aumentado, pero tampoco ha bajado". El de Colmenar de Oreja expresaba su decepción por el escaso juego de los novillos de Ordóñez: "no servían casi ni para estar valiente".
