Edad del susto

Deseo con esta carta responder a la que envía Fernando Martín y que fue publicada el día 2 de abril.Amigo Fernando: Tienes horror a la mili, 23 años, y estás finalizando Derecho. Eso es maravilloso. ¿Cómo se puede estar tan asustado a esa edad? En todo caso, deberías estarlo por las dificultades que te esperan para encontrar trabajo, por la competencia que existe, pero tienes la ventaja de haber elegido una carrera comodín que sirve para múltiples oposiciones además de la iniciativa privada. Resumiendo: escogiste la carrera que más sal¡das tiene y ha tenido en este nuestro país.

¿Por qué miedo a la mili? Y seguro que a los tres meses de campamento, ¿no es así? Has de saber que la única vez en toda la vida donde se da plena solidaridad, auténtica mezcla de personas diferentes y todos haciendo exactamente lo mismo, es durante el campamento militar. Jamás se da luego esa situación. Se hacen amistades que duran siempre. ¿El asunto de las bromas? Se gastan en todas partes, aunque si has leído la Prensa sabrás que, como ha habido abusos, el Ministerio de Defensa va a tomar cartas en el asunto. Duración: ahora es un año sólo; hace 20 años eran 15 meses y hace 35 años eran 30 meses. Miedo debes tenerlo si te declarasen inútil total para el servicio, pies planos, estrecho de pecho, corto de talla, miopía galopante¡ etcétera. Tienes que mentalizarte que la mili hay que hacerla porque lo dice la Constitución, y punto. Miedo deberían tenerlo los que desean hacerla y luego quedan excedentes de cupo. Te aseguro que no se pasa tan mal allí como muchos creen. También ocurre que ahora está bien visto no querer hacerla; existen los objetores, etcétera. Piensa que debes terminar los estudios, hacer la mili (sabes que ahora ya ni tan siquiera cortan el pelo al cero al que hace alguna), y después comenzar cuanto antes a buscar trabajo, pues ya tendrás hecho el famoso SMC (servicio militar cumplido). También podrías cambiar de aires y largarte un par de años al extranjero, trabajar en lo que fuese y de paso aprender un idioma (yo volvería a hacerlo si volviese a tener 20 años). Pero para eso hay que ser un poco más decidido, muchacho.

Pero los jóvenes de ahora no tenéis la culpa de esta situación tan kafkiana que existe. Quiero decir que mientras exista la figura del excedente de cupo al mismo tiempo que la obligatoriedad de hacer la mili se produce una contradicción tan grande (además, han rebajado tres años la edad de incorporarse a filas, como si ahora a los 19 años fuesen los jóvenes tan maduros como hace unos años a los 22 años) que no hará felices ni a los que van a la fuerza ni a parte de los excedentes, por la misma causa.-