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La casa de Iván de Vargas se convertirá en un centro documental sobre la droga

La casa de Iván de Vargas, situada en la calle del Doctor Letamendi, se convertirá en sede del área de servicios sociales y en el principal centro documental sobre la droga. La adquisición del edificio se llevará el 10% del plan municipal antidroga, presupuesto en 1.209 millones de pesetas. Por su parte, la comunidad ha decidido reformar a fondo el plan regional de ayuda al toxicómano que cuenta este año con 450 millones.

El Ayuntamiento llevaba tiempo buscando un edificio para equipamientos en el Madrid de los Austrias. La casa de Iván de Vargas, así llamada por levantarse en el siglo XI sobre el solar donde tuvo su vivienda el patrón de san Isidro, dispone de unos 2.500 metros cuadrados, en los que se instalará el citado centro de documentación, que corre por cuenta de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, presidida por la Reina. El inmueble albergará también el área municipal de servicios sociales.Las negociaciones mantenidas con la familia Forns, propietaria del inmueble, pueden estar terminadas antes del verano, momento en el que empezarían las obras. El Ayuntamiento habrá de llegar también a un acuerdo con el único inquilino, que ocupa una vivienda de 590 metros cuadrados. El coste del edificio y la rehabilitación será de unos 330 millones de pesetas.

Unos 115 millones de pesetas de esta partida, junto a otros 435 millones para la construcción de cuatro nuevos centros para atención de toxicómanos, forman parte del plan municipal antidroga, que será aprobado previsiblemente en un pleno extraordinario el próximo 29 de abril.

Del resto, hasta los 1.209 millones, destacan las síguientes partidas: 160 millones para subvenciones a entidades asistenciales y a convenios que se firmen con instituciones; 157 millones para contratar a 66 personas para los nuevos centros; 101 millones para la realización de programas de atención en comunidades terapéuticas y pisos de acogida, y 38 millones para la creación de dos equipos que actúen en la cárcel de Carabanchel y en el juzgado de guardia.

Plan regional

La consejera de Integración Social, Elena Vázquez, reconoció ayer que el plan regional contra la droga, que lleva tres años en funcionamiento, "se ha quedado cojo en las fases de prevención y reinsercíón". El 60% de los toxicómanos que entraron en contacto con el plan el último año lo abandonó a lo largo del tratamiento.

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La comunidad ha lavado la cara al plan y pretende poner en marcha una nueva red de asistencia. Según Julio Álvarez, responsable del programa regional, "las unidades de salud mental, donde actualmente se trata a la mayoría de los drogadictos, irán dejando paso a los nuevos centros ambulatorios".

El plan regional prevé las creación de seis centros de este tipo y una nueva comunidad terapéutica en el complejo El Palancar, en la sierra norte de Madrid.

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