Kabul acusa a Islamabad de presentar cuestiones "innegociables"
ENVIADA ESPECIAL El ministro de Exteriores afgano, Abdul Wakil, acusó ayer a Pakistán de estar introduciendo en las negociaciones para la retirada soviética cuestiones "innegociables". "Pakistan está perdiendo la oportunidad histórica de firmar el acuerdo de Ginebra y mejorar las relaciones con Afganistán", afirmó.
Según Wakil, Islamabad trata de incluir en la agenda de Ginebra problemas ajenos a ésta como la delimitación de las fronteras comunes, punto que, destacó, afecta también a India.
El jefe de la diplomacia afgana convocó a la Prensa internacional en el Palacio de las Naciones para responsabilizar a Islamabad del bloqueo de las conversaciones. Indicó que las consecuencias del retraso de la firma del acuerdo son "trágicas" porque suponen que los 115.000 soldados soviéticos tardarán más en marcharse. Añadio que "es un error" pensar que los 60 días establecido por Moscú entre la firma y la salida de los efectivos militares se reducirán.
Sin embargo, a pesar de las críticas, Wakil siguió insistiendo en que Afganistán quiere que se firme un acuerdo y en que las conversaciones se extenderán hasta que Islamabad haya tomado una decisión.
Zain Noorani, ministro de Exteriores de Pakistán, antes de reunirse con el mediador de la ONU, Diego Cordovez, indicó que su Gobierno ya ha tomado una decisión sobre el acuerdo, pero necesita "ciertas garantías" sobre la formación de un Gobierno de transición en Kabul.
"Ni antes, ni después de Ginebra están los afganos dispuestos a aceptar un Gobierno organizado por Pakistán y exportado a Kabul", señaló Wakil.
Wakil insistió en la resistencia está dividida e indicó que su Gobierno considera más aceptables a los jefes militares que están dentro de Afganistán que a los políticos que viven en el exilio. En cuanto a estos, agrupados en la Alianza, dijo que sería "inaceptable" que una delegación vaya a Ginebra a inmiscuirse en las negociaciones de dos Estados soberanos, pero indicó la disponibilidad de Kabul para que negocien un Gobierno de reconciliación nacional.
