La chispa que hizo de detonante
AGENCIAS, La policía saudí cargó el viernes contra miles de manifestantes iraníes en La Meca, cuando estos quemaban una bandera norteamericana en un "acto simbólico de odio a los paganos", dijo ayer uno de los heridos, según informó la agencia oficial iraní, Irna.
La policía saudí, según la víctima, de nacionalidad iraní, atacó a los manifestantes por la espalda con porras, gases lacrimógenos y mangueras de agua hirviendo. Un peregrino sudanés que resultó también herido declaró a Irna que las fuerzas de seguridad saudíes dispararon sin avisar, hiriendo y matando a numerosas mujeres que iban a la cabeza de la manifestación.
Varios peregrinos iraníes fueron agredidos ayer en la ciudad santa por agentes saudíes vestidos de civil, que les arrojaron piedras desde los tejados, afirmó Radio Teherán captada en París.
Un corresponsal de la radio iraní en La Meca manifestó que "la película difundida el sábado por la televisión saudí, omitió mostrar las escenas de las fuerzas de seguridad saudíes disparando contra los manifestantes y utizando gases lacrimógenos.
El filme, según el corresponsal, "provocó un clima de hostilidad contra los peregrinos íraníes", que ayer prospusieron en la ciudad santa su asistencia a los ritos del haj.
La cifra oficial de víctimas en los sucesos de la Meca que ayer facilitó la televisión saudi, es lo suficientemente elevada para inscribirse en los anales de los sufrimientos padecidos por la rama shií del Islam frente a la ortodoxia suní, a la que pertenece la monarquía saudí. Según las estimaciones oficiales saudíes, 402 personas murieron y 649 resultaron heridas. Entre los fallecidos, 275 iraníes y 85 agentes de la policía.
Sin embargo, Radio Teherán afirmó ayer que los enfrentamientos causaron 650 muertos y desaparecidos entre los peregrinos iraníes. La emisora dijo también que 700 habían sido hospitalizados.
El cónsul iraní en Yecla dijo que hubo un número indeterminado de iraníes detenidos en La Meca.
