El nuevo Gobierno canario suspenderá temporalmente la polémica ley de Aguas
El nuevo Gobierno autónomo suspenderá temporalmente la aplicación de la ley de Aguas de Canarias, según anunció Fernando Fernández, del Centro Democrático y Social (CDS), a quien corresponde la presidencia del Ejecutivo en virtud del llamado pacto de centro-nacionalista-derecha que alcanzaron el CDS, las Agrupaciones Independientes de Canarias (AIC), AP y la Agrupación Herreña Independiente (AHI).
Fernández explicó, tras la constitución del Parlamento regional, que la paralización de la polémica ley permitirá modificar aquellos aspectos de la misma con los que no están de acuerdo los partidos que gobernarán en Canarias durante los próximos cuatro años. Negó, sin embargo, que con esta medida se pretenda derogar la norma.Los sectores agrícolas, y, en especial, los propietarios de los pozos y galerías, habían presionado con manifestaciones en la calle y una fuerte campaña de prensa para que la ley fuera retirada del Parlamento. No obstante, el PSOE, con el apoyo del PCE, el Partido de la Revolución Canaria y Asamblea Majorera (AM) -juntos formaron el pacto de progreso-, logró aprobar en la Cámara poco antes de las pasadas elecciones el conflictivo texto legal. Las aguas canarias fueron declaradas de dominio público y se creó un registro de inscripción, implantándose un sistema de concesiones prorrogable cada 15 años.
Canarias es la única comunidad autónoma con competencias para elaborar una ley propia sobre esta materia. El CDS, que ahora asume la presidencia y vicepresidencia del Gobierno tras la etapa socialista, es partidario de conservar el carácter público de las aguas, pero se comprometió durante la campaña a respetar los derechos adquiridos mediante indemnizaciones.
La recaudación
Por otro lado, la recaudación tributaria de la comunidad autónoma canaria se elevó en el primer semestre de este año a 26.000 millones de pesetas, lo que ha sorprendido a las propias autoridades regionales, ya que a lo largo del año pasado la cifra total correspondiente a impuestos giró en torno a 37.000 millones de pesetas. El fuerte incremento experimentado se debe, en primer lugar, a la aplicación de un impuesto sobre combustibles, que ha generado en la primera mitad de este ejercicio unos 7.700 millones de pesetas. Según el director general de Presupuestos, Gasto Público y Tributos de la Consejería de Hacienda, Fernando Redondo, "el nivel de recaudación revela, además de una gestión eficaz, la situación saludable de la economía canaria y una mayor colaboración del contribuyente".La Hacienda autónoma del archipiélago se nutre, además de con el citado impuesto, de los arbitrios insulares sobre el lujo y entrada de mercancías, así como de los tributos cedidos por el Estado. Se advierte en esta ocasión un notable crecimiento de la importación de vehículos, que aumenta considerablemente el capítulo de lujo, y un importante desarrollo del concepto de bingos.
Las cantidades obtenidas por arbitrios son destinadas a dotar las haciendas de las corporaciones locales. Por otra parte, el impuesto sobre el combustible, que fue creado para equilibrar los desajustes experimentados en los precios de los carburantes en Canarias, va a parar a los presupuestos de la comunidad autónoma.
