EE UU retirará los F-16 de Torrejón en un plazo de cinco años

El Gobierno español está convencido de que Estados Unidos aceptará la retirada escalonada de los 72 cazabombarderos F-16 de Torrejón de Ardoz, pese al aparente bloqueo de las negociaciones hispano-norteamericanas. Según impresiones recogidas en medios oficiales, Washington ha admitido ya la posición española sobre Torrejón, accediendo a la salida de los F-16 en un plazo gradual de unos cinco años, aunque se reserva el anuncio de su decisión mientras duran las negociaciones.

La salida de los F-16 de Torrejón, previsiblemente a una base ubicada en Portugal, se realizaría en el horizonte del acuerdo hispano-norteamericano que suceda al actual. La impresión en medios españoles es que los norteamericanos no anunciarán su disposición a desmantelar Torrejón hasta el próximo otoño, según se acerque el final del plazo de conversaciones sobre la reducción de las bases, previo a la negociación de un nuevo convenio bilateral.Mientras, en las reuniones celebradas el jueves y el viernes en Madrid -la sexta ronda desde que se inició el proceso negociador, el 10 de julio del pasado año- oficialmente "no se avanzó nada", insistiendo ambas partes en sus conocidas posiciones. Los españoles han reiterado que es "irrenunciable" el punto clave de su propuesta sobre la salida de España de los F-16. Los norteamericanos insistieron en la "vital importancia" que los F-16 tienen para la seguridad del flanco sur de la Alianza Atlántica. La próxima sesión negociadora se celebrará en Madrid el próximo mes de septiembre.

Sobre este tema, el hasta ahora máximo jefe de las tropas de la OTAN en Europa, el general Bernard Rogers, dijo ayer que "si fueran retirados de España [los F-16], se plantearía la cuestión de qué país, en el sur de Europa, podría aceptarlos [como base fija] o si tendríamos que traerlos de EE UU [para cada acción militar]". Rogers compareció ayer en su última conferencia de prensa antes de entregar el mando a su sucesor, el general norteamericano John Galvin. Para Rogers, la retirada de Torrejón "crearía un precedente para otras naciones".

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