La Audiencia de Valladolid confirma el procesamiento de Demetrio Madrid
El auto de procesamiento contra Demetrio Madrid, presidente en funciones de la Junta de Castilla y León, se mantiene en todos sus extremos al haber desechado el pleno de la Audiencia Territorial de Valladolid el recurso presentado por los tres procesados: Demetrio Madrid, su hijo Adolfo Madrid y Esteban Cisneros.Según manifestó Teófilo Ortega, presidente de la Audiencia Territorial, el pleno consideró que no había ninguna circunstancia que modificara la situación anterior, por lo que el auto de procesamiento (basado en la existencia de indicios de supuesta venta fraudulenta de la empresa textil Pekus, propiedad de la familia Madrid, a Esteban Cisneros, que se declaró insolvente poco después de efectuada la compra) se mantiene en todos sus términos.
El pleno de la audiencia decidió el 29 de octubre el procesamiento de los tres encausados como consecuencia de una querella presentada por 11 de las 13 trabajadoras de Pekus, que consideraban que sus derechos económicos y laborales habían sido conculcados.
Horas después de que se hiciera público el procesamiento, Demetrio Madrid anunciaba su dimisión como presidente de la Junta de Castilla y León, lo que dio origen a la puesta en marcha del mecanismo de sucesión al frente del Gobierno autónomo, proceso que culminó el pasado día 14 con la elección del socialista José Constantino Nalda como presidente por mayoría absoluta en las Cortes regionales.
Nalda tomará posesión el próximo lunes y ese mismo día por la tarde hará pública la lista de consejeros, en la que habrá numerosas novedades respecto al actual Gobierno, ya que varios de sus componentes se negaron a continuar en lajunta encabezada por Nalda.
La desestimación del recurso contra el auto de procesamiento no admite recursos a otras instancias, por lo que el auto es firme. Se solicita de los tres procesados el depósito de una fianza de 17 millones de pesetas, cada uno, para hacer frente a las supuestas responsabilidades económicas que pudieran derivarse en su día de la sentencia.
