Peciña piensa dedicarse en España a "pasear, pescar y leer"
El capitán José Luis Peciña regresa hoy a España, después de que las autoridades diplomáticas españolas en Nigeria solucionaran los problemas burocráticos que retrasaron su retorno al país. El capitán del Izarra manifestó a este periódico que, de momento, no se plantea otra alternativa para cuando llegue a casa que dedicarse a "pasear, pescar y leer".
José Luis Peciña ha engordado varios kilos debido, al parecer, a la comida que desde octubre le venía enviando a diario su mujer, que esperaba en un hotel de Nigeria su excarcelación. También desde esas mismas fechas el capitán Peciña tuvo oportunidad de recibir la Prensa, "sobre todo revistas del corazón"; por ese motivo los diplomáticos de la embajada bromean con él, diciendo que es uno de los hombres mejor informado sobre los últimos acontecimientos de la jet.Desde la mañana de ayer todo el personal diplomático de la Embajada española en Nigeria realizó diversas gestiones en los ministerios nigerianos de Interior y Justicia para conseguir el certificado final de excarcelación y el permiso de migración.
Ésta fue la causa por la que el capitán, su mujer -María Teresa Ruiz de Gordejuela- y su hija mayor -Teresa- se vieron obligados a retrasar su viaje de regreso a España.
Debido a un problema de falta de plazas en los aviones, las dos mujeres regresan a España, vía Bruselas, en un vuelo distinto al que utilizan José Luis Peciña y el director general de Asuntos Consulares, Rafael Pastor Ridruejo, quien acudió a Lagos en cuanto se supo que Peciña iba a ser puesto en libertad.
Ayer por la tarde, en la casa familiar de Guecho, las dos hijas de Peciña ultimaban los preparativos para su viaje a Madrid con el fin de recibir a su padre.
