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Las autopistas han reducido sus pérdidas en más de 9.000 millones de pesetas en los últimos cinco años

Las empresas concesionarias de autopistas cerraron el ejercicio correspondiente a 1985 con unas pérdidas conjuntas de 9.218,6 millones de pesetas, lo que supone una reducción de prácticamente el 50% sobre las registradas en 1981. En el mismo período, el Estado pagó en concepto de seguro de cambio 200.025 millones de pesetas, de los que 83.468 millones de pesetas correspondieron al pasado año. Dicho seguro de cambio, considerado como una forma de subvención indirecta que no se refleja en los balances, supone que el Estado facilita las divisas precisas para el pago de los principales e intereses de los préstamos concertados en el exterior, al tipo de cambio vigente en la fecha que se formalizaron.

De acuerdo con los datos recogidos en el balance global, las empresas concesionarias de autopistas registraron en 1,985 un excedente: de explotación positivo de 29.602 millones de pesetas. Los gastos financieros, en los que no se incluye el seguro de cambio, se elevaron a 32.498 millones de pesetas, por lo que al final el resultado neto fue negativo en 9.218 millones de pesetas.A nivel empresarial, la empresa más rentable es Autopistas Concesionaria Española, SA (ACESA), que registró unos beneficios de 2.060 millones de pesetas el pasado ejercicio. Sin embargo, lo más destacable del ejercicio es que ACESA consiguió un resultado de explotación antes de gastos financieros -se elevaron a 5.488 millones de pesetas- de 12.291 millones, que le permitieron destinar 4.743 millones al fondo de reversión.

Dicho fondo, establecido por ley, supone una reserva que tienen que constituir las empresas para recuperar el importe actualizado de las inversiones que hicieron y del que no pueden disponer hasta finalizar el plazo concesional de la autopista. Junto a ACESA, las concesionarias que destinaron partidas a este fondo fueron Europistas, con 389,5 millones, Eurovías (291,9 millones), Autopistas del Mare Nostrum (208,8 millones) y Bética de Autopistas (77 millones).

La rentabilidad de ACESA no hace sino complicar más la situación accionarial de esta sociedad, en cuyo capital social participa el Fondo de Garantía de Depósitos con un 57,8%, así como la sociedad de cartera del INI Imerinsa, que se hizo cargo del 5% de las, acciones que tenía Seat después de la operación con la alerriana Volkswagen. El futuro de esta empresa, que provocó serios enfrentamientos en su día entre el entonces ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, y el ministro de Obras Públicas, Julián Campo, deberá ser uno de los temas a solucionar por el nuevo Gobierno.

Actualmente, tanto la Dirección General del Patrimonio como la del Tesoro parecen proclives a las tesis del MOPU de pasar ACESA al sector público, mientras que el Banco de España se muestra más partidario de la reprivatización. Los buenos resultados de ACESA la han convertido en una empresa muy apetitosa, lo que ha hecho que varias sociedades privadas -especialmente La Caixa- hayan, mostrado su interés por adquirirla.

Los temas pendientes

Según un informe que obra en poder de Hacienda, la incorporación de ACESA u la Empresa Nacional de Autopistas (Enausa) aportaría unos ingresos de 283.407 millones de pesetas, que permitirían anticipar la amortización de la deuda externa del grupo público, que hasta mayo de este año se elevaba a 116.748 millones de pesetas.Para los expertos del sector, la solución al caso de ACESA y la fusión de Europistas y Eurovías son los dos únicos temas que quedan pendientes para conseguir una reestructuración total de las autopistas.

La fusión de Europistas y Eurovías podría concretarse en el próximo otoño, pues aunque el proceso electoral frenó las conversaciones entre los interesados y la Administración, las discrepancias parecen poder solventarse por la contundencia de los números. La fusión, en principio, parece condicionada a la construcción de un nuevo tramo de autopista, cuya rentabilidad es la que cuestiona la Administración.

Concretamente se necesitaría invertir para un trazado muy corto unos 45.000 millones de pesetas. Además, el tráfico calculado no supera los 4.500 vehículos diarios, que además no serían trafico nuevo sino que se desviarían de otros tramos de autopistas colindantes, repercutiendo negativamente en esas concesionarias.

Uno de los pasos más importantes que se han producido a lo largo de 1985 dentro de los planes, de la Administración de reestructurar el sector ha sido la fusión de las empresas Bética de Autopistas y Autopistas del Mare Nostrum (Aumar), ambas pertenecientes al grupo industrial del Banco Central.

Dicha fusión, que fue aprobada el pasado mes de junio, va a permitir no sólo potenciar la empresa concesionaria resultante -la fusión es por absorción de Bética por Aumar-, sino una ayuda a la definitiva consolidación de Iberpistas, pues esta última sociedad obtuvo unos ingresos adicionales de unos 1.700 millones de pesetas por la venta de su participación en Bética de Autopistas. Esta sociedad y Aumar fueron las únicas, junto con ACESA y Europistas, que consiguieron cerrar su ejercicio correspondiente al pasado año con beneficios, de 321 millones la primera y de 1.879 la segunda. Iberpistas registró unas pérdidas de 315 millones de pesetas.

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