La Comisión propone retrasar la libre circulación de los trabajadores turcos
La Comisión Europea ha propuesto a los doce el retrasar la libre circulación de los trabajadores turcos en la Comunidad Europea (CE), que debía entrar en vigor en diciembre de 1986, para que éstos no estuvieran en mejor situación que los trabajadores españoles y portugueses. En el terreno de la normalización de las relaciones entre la CE y Turquía, congeladas desde el golpe de Estado militar de 1980, la Comisión propone liberar algunos fondos destinados a Turquía.Por el acuerdo de asociación entre Turquía y la CE de 1963, la libre circulación de los trabajadores turcos en la Comunidad debía ser una realidad a finales del presente año. Pero este acuerdo señala también que los trabajadores turcos no podrán beneficiarse de un trato más favorable que el de los trabajadores de los Estados miembros. Y para los portugueses y españoles, el período transitorio en esta materia expira en 1992.
Los ministros de Asuntos Exteriores de los doce deberán debatir estas cuestiones el próximo lunes. La Comisión propone asimismo el desbloquear 10 millones de ECU (1.360 millones de pesetas) de ayuda a Turquía para reanudar, la cooperación financiera tras el golpe, la CE bloqueó el cuarto protocolo financiero con Turquia, que comportaba 600 millones de ecus de préstamos y 29 millones de ecus de ayuda. Falta aún además negociar la adaptación del acuerdo de asociación de Turquía con la CE a raíz de su ampliación a Grecia y después a España y Portugal.
Por otra parte, la Comisión presentó ayer su programa marco 1987-1991, de política de investigación y desarrollo, con una propuesta de gastos de 9.000 millones de ECU (1,2 billones de pesetas), es decir, casi el triple que para 1984-1987. Son los ministros de los doce los que tendrán que tomar la decisión. Con respecto al programa anterior, las prioridades han cambiado. Un 60% de los fondos estará destinado a aumentar la competitividad de la industria europea, y un 21%, al sector de la energía (frente al 28% y, 47%, respectivamente, en el programa anterior). Los tres objetivos principales del nuevo programa son la promoción de la competitividad industrial, el incremento de la calidad de vida y la creación de una Europa de los investigadores.
