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Luis Molowny, preocupado por la composición de la media madridista

El entrenador del Real Madrid, Luis Molowny, no acaba de encontrar la clave adecuada para esbozar un centro del campo que le dé al equipo un toque de regularidad y un esquema definido. El Madrid volvió a poner de manifiesto en Atenas, ante el AEK, que esa irregularidad le hace ganar partidos a bases de rachas de inspiración individual, pero también perder otros con una imagen lamentable, ante rivales cuya única capacidad radica en la dureza de sus entradas. Dentro del equipo comienza a vislumbrarse que los desencuentros entre Gallego, el cerebro en baja forma de la selección española para el decisivo choque ante Islandia, y Juanito, resucitado por Molowny esta temporada, no resultan cómodos en la tarea de ordenar regularmente una proyección ofensiva. Molowny ha sustituido en los últimos partidos a Gallego, para situar a Martín Vázquez por la derecha y pasar a Michel como eje del equipo.

Molowny afirma: "No nos dejaron jugar, era imposible hilvanar acciones porque cada tres metros nos hacían una falta". Técnico y jugadores, sin embargo, confían en superar esta eliminatoria en el Bernabéu. Pero el problema de fondo madridista, independientemente de actuaciones brillantes o discretas de sus jugadores sobre el césped, de aciertos o errores individuales, o de que Butragueño alterne en cuatro días la genialidad con la desaparición escénica, radica en la absoluta descompensación de un centro del campo que ha comenzado la temporada oficial con la única nota positiva de comprobar que Michel está para labores mayores que las de subalterno. Gallego está mal y, en Atenas, de cada tres pases fáciles que intentó, sin llegar incluso a arriesgar, falló dos; Gordillo sigue sin coger un tono físico regular, y Juanito ha pasado de destacar en sus actuaciones iniciales a un índice alto de desaciertos.

Aglomeración

Molowny, muy preocupado desde la pretemporada por encontrar un sistema de marcaje adecuado a las características técnicas de sus jugadores, buscó como fórmula intermedia la de incluir a Juanito como hombre de enlace entre Michel, Gallego y Gordillo, con los puntas Butragueño y Hugo. Ello ha traído como consecuencia una mayor aglomeración de jugadores dispuestos a estorbar al rival cuando éste ataca, pero también una sensación de incomodidad en las teóricas acciones de ordenar el juego ofensivo del equipo, y la pérdida de variantes de ataque en el remate porque los centros de Gordillo no encuentran rematador de altura arriba.

El primer conflicto de competencias en el Madrid actual, pues, está a punto de producirse. A falta de un sistema ordenado de relevos, la solución de Molowny hasta el momento se ha centrado, sistemáticamente, en sustituir a Gallego por Martín Vázquez tras los descansos, y, últimamente, al propio Juanito por Valdano cuando el partido entra en la fase final.

Mientras se busca equipo aún, el Madrid es líder en la Liga y, pese a su derrota de Atenas, parece probable que supere la eliminatoria ante el discreto AEK.

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