Protestas en Irán contra la guerra y el régimen
ENVIADO ESPECIAL
La oposición de derecha al régimen del ayatollah Jomeini levantó ayer por primera vez la cabeza, tras seis años de silencio y de miedo. Miles de iraníes, según las agencias de prensa, y centenares de miles según medios de la oposición moderada, se echaron ayer a las calles de las principales ciudades de Irán para protestar contra la guerra y contra el régimen islámico, que la continúa sin resultados concretos. Las manifestaciones no son nuevas, pero sí el protagonista de la convocatoria: Shapur Bajtiar, último primer ministro del sha Reza Pahlevi. Para Bajtiar, el pueblo iraní se ha convencido de que Jomeini lleva a Irán a la catástrofe.
Partidario de una monarquía constitucional "como la que entre ustedes los españoles encarna el rey Juan Carlos", Bajtiar anunció que su estado mayor estudia la convocatoria de una huelga general y se negó a pronunciarse sobre si existen o no conversaciones entre sus partidarios y sectores pragmáticos del régimen iraní. "En cualquier caso, ignoro a los sectores radicales del régimen", señaló.
Sin embargo, estos sectores fueron pioneros en la lucha directa contra los dignatarios del régimen y sus órganos de seguridad. La Organización de los Muyahidin del Pueblo ha acumulado la mayor fuerza y acción a la hora de situarse en la primera línea de la transición al régimen. "Fuera del Consejo Nacional de la Resistencia la única alternativa que queda es la guerra civil y un baño de sangre de dimensiones inusitadas", dijo ayer Masud Rayavi, líder de los muyahidin. Rayavi no piensa pactar con nadie y exhibe el crecido número de muertes entre sus seguidores como garantía de que el futuro les pertenece. "Jomeini nos engañó una vez, pero fue la última".
